La Audiencia Nacional archivó ayer la causa abierta contra once militantes de la Assembleia da Mocidade Independentista (AMI) que en noviembre del 2005 fueron detenidos, entre otros cargos, por supuesto enaltecimiento del terrorismo. El que se convirtió en uno de los despliegues policiales más espectaculares realizados en Galicia en los últimos años contra grupos independentistas, y que se llevó a cabo bajo la denominación de operación Castiñeira, queda así cerrado tras considerar el Ministerio Fiscal que no existen pruebas suficientes como para proceder a juzgar a los once detenidos.
Según pudo confirmar La Voz de Galicia en fuentes judiciales, el magistrado de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz firmó ayer mismo el archivo de la causa abierta por un delito genérico y principal de asociación ilícita y enaltecimiento del terrorismo, además de daños y alteración del orden público, quema de banderas, agresiones a agentes de la autoridad, incendios en cajeros y mobiliario urbano, pintadas, amenazas a distintas personas e instituciones, injurias a la monarquía, a las fuerzas de seguridad y a las Fuerzas Armadas, tal y como argumentó en su día el Ministerio del Interior para justificar las detenciones.
Amplio despliegue
Los arrestos fueron realizados por la Guardia Civil el 14 de noviembre del 2005 de manera simultánea en Santiago, Ourense, Lugo y Vigo; la operación se culminó el 16 de febrero del año siguiente en Ferrol con una última detención. Catorce registros se llevaron a cabo en los domicilios de los detenidos y locales frecuentados por integrantes de organizaciones independentistas, donde se incautó diversa documentación, tras haberse procedido también a la intervención de varios teléfonos móviles y de correos electrónicos.
Los once detenidos fueron puestos en libertad por el juez Santiago Pedraz tan solo dos días después de producirse su traslado a Madrid. Tanto la Fiscalía como el propio juez estimaron que los delitos imputables a los detenidos no se relacionaban con el terrorismo, y que por lo tanto no eran competencia de la Audiencia Nacional. Tras remitir el caso a los juzgados de Santiago, este se inhibió y recurrió al Supremo para argumentar la competencia de la Audiencia en el asunto, lo que así fue estimado finalmente.
La puesta en libertad fue aprovechada por el más veterano de los detenidos, Antom García Matos, Toninho, para desaparecer. Condenado años antes por tenencia de explosivos y pertenencia al Exército Guerrilheiro do Povo Galego Ceive (EGPGC), ahora es tenido por cerebro del grupo Resistencia Galega.
La operación Castiñeira fue considerada en su día por parte del BNG como desmedida.