Un trasatlántico atraca en A Coruña con una pasajera muerta por un virus

GALICIA

26 abr 2008 . Actualizado a las 02:13 h.

El trasatlántico Funchal , con bandera de Madeira, atracó ayer en el puerto de A Coruña con una de sus pasajeras muerta y unas 80 personas, entre viajeros y tripulantes, intoxicadas por un virus estomacal, que derivó en una fuerte gastroenteritis.

La fallecida, Alice Gumbor Andersson, de nacionalidad sueca, viajaba como turista acompañada de su pareja y una de sus hijas. Al parecer, se encontró indispuesta después de una comida celebrada a bordo un día después de zarpar el barco del puerto sueco de Gotemburgo, según indicaron fuentes de la investigación.

No obstante, la mujer tenía un tumor cerebral maligno y estaba en fase terminal. Sin embargo, a falta de las pruebas definitivas que se extraerán de la autopsia, «murió de un fallo cardíaco el pasado jueves a las once de la mañana», señalaron las mismas fuentes. Tampoco descartaron que el proceso coronario que acabó con su vida se debiera «a los efectos derivados del virus que cogió a bordo del trasatlántico».

El capitán del buque Funchal alertó a las autoridades españolas de la situación a través de su consignataria en A Coruña, Rubine e Hijos. El responsable de la empresa, Luis del Moral, fue el encargado de gestionar todo el proceso para que el atraque del barco en el muelle de A Coruña no significase ningún riesgo para la ciudadanía. Además, el capitán no izó la bandera amarilla para avisar de que tenía problemas de salud a bordo. Los prácticos coruñeses accedieron al buque con equipos de seguridad para evitar contagiarse y, una vez que la nave amarró al muelle, embarcaron los responsables de Salud Exterior del puerto coruñés, así como varios agentes de la Policía Nacional.

Cuarentena

Los expertos en medicina mantuvieron una reunión con el médico del buque. Este fue el encargado de explicar a los responsables sanitarios españoles la situación en que se encontraban las personas intoxicadas y los análisis que ya había realizado anteriormente para averiguar la procedencia del virus. Los facultativos del puesto de A Coruña comprobaron toda la documentación y pusieron en cuarentena a las personas que se vieron afectadas o estuvieron en contacto con el virus.