La apuesta del Gobierno gallego por potenciar el transporte público de viajeros con más y mejores servicios conllevará la realización de estudios de viabilidad para crear carriles bus en las siete ciudades. Con ello se busca ofrecer a los ciudadanos una alternativa más segura y más económica al vehículo particular, y mitigar así la congestión de tráfico en las áreas metropolitanas. Aunque la idea está más madura en Vigo y A Coruña, donde la Xunta espera disponer en dos años de esos estudios para acometer las obras necesarias en el horizonte del 2010, las prospecciones se extenderán a Santiago, Ourense, Pontevedra, Lugo y Ferrol.
Esos estudios determinarán la solución más adecuada según se trate de una ciudad u otra: si resulta más operativo construir una plataforma exclusiva con bordillos de separación para la circulación de los autobuses y taxis, o si basta con señalizar un carril en la calzada por el que solo podrá circular el transporte público. El propósito de la Consellería de Política Territorial es favorecer la operatividad del servicio y que cumpla su horario, evitando que los trayectos en autobús aboquen al usuario a padecer las mismas retenciones que soportan a bordo de sus coches.
Ganar tiempo
La implantación del carril bus es una de las medidas previstas en la Lei de Fomento do Transporte Público, que la Xunta remitirá al Parlamento en este semestre y que articulará la estrategia autonómica para tratar de incrementar en un 50% los alrededor de 25 millones de usuarios actuales en Galicia. En esa estrategia, el departamento que dirige María José Caride pretende ganar tiempo para que los autobuses metropolitanos puedan funcionar en el entorno de las siete ciudades a finales de año. Para ello, la consellería promoverá en los próximos meses la firma de convenios con los municipios de las siete áreas metropolitanas.
El nuevo servicio de autobuses metropolitanos introducirá varias mejoras respecto a los que ya funcionan en las ciudades de A Coruña, Santiago y Ferrol, como un sistema de tarifas zonales y la despenalización del transbordo. Aunque la piedra angular será una nueva tarjeta que permitirá al usuario subirse primero en un autobús metropolitano, que tendrá una imagen diferenciada, y después en otro urbano sin pagar por ello dos trayectos.
«Sin contacto»
La tarxeta metropolitana estará provista de una tecnología sin contacto, que permitirá su lectura sin necesidad de introducirla en una máquina. Únicamente bastará con que el usuario la aproxime, lo que contribuirá a agilizar el acceso de viajeros.
La tarjeta metropolitana posibilitará además una integración tarifaria, con lo que se evitará que por un mismo recorrido se pague más si se viaja con una empresa o con otra. La conselleira de Política Territorial, María José Caride, ya ha adelantado que las tarifas serán competitivas.
Pero la que será la primera regulación del sector en Galicia también pretende dar respuesta a las necesidades que se generan en el ámbito rural, dando cobertura legal a las iniciativas que Política Territorial ya ha puesto en marcha, como son el transporte escolar compartido, el transporte a la demanda y el programa Tes máis Bus.
El mapa concesional que existe en la comunidad ya cubre en la actualidad todo el territorio en expansión, pero no garantiza la calidad del servicio que se presta sobre todo a los núcleos rurales.