Cuatro imponentes buques de guerra con 1.400 marinos a bordo se encuentran estos días en A Coruña, donde permanecerán hasta el próximo lunes, para iniciar una nueva misión internacional de la agrupación permanente número 1 de la OTAN. Se trata de la fragata española Álvaro de Bazán , que será el buque insignia del grupo; la fragata alemana Rheinland Phalz ; el destructor Bainbridge , de Estados Unidos, y el petrolero español Marqués de la Ensenada . Los tres primeros navíos están ya atracados en el puerto coruñés, mientras que el último llegará hoy a las diez de la mañana.
Esta agrupación de la Alianza Atlántica tiene carácter rotatorio, tanto por las naves como por las naciones que la integran, y los cuatro buques que la conformarán este año se han reunido en A Coruña para preparar su próximo cometido y efectuar el relevo en la jefatura.
Este cambio se hará efectivo el viernes. El contraalmirante Michael K. Mahon, de la Marina estadounidense, cederá el mando del contingente al contralmirante ferrolano Juan Rodríguez Garat, que está al cargo de la Álvaro de Bazán .
Éxito sin precedentes
A lo largo del año pasado, la fuerza naval número 1 estuvo participada por navíos de Canadá, Dinamarca, Portugal, Alemania, Holanda, España, Reino Unido y Estados Unidos. Según precisa el Ministerio de Defensa, la agrupación militar obtuvo un éxito sin precedentes para incrementar «el entendimiento marítimo global», con presencia en África y el Caribe. En el 2008, los buques operarán en el océano Atlántico, el Báltico y el Mediterráneo para «mejorar el control y conocimiento de la situación en esas zonas por parte de la Alianza, y llevar a cabo ejercicios navales conjuntos».
Ayer, decenas de marinos de la Álvaro de Bazán aprovecharon la cercanía de la fragata a su puerto base y se desplazaron a Ferrol a visitar a la familia. Otros muchos miembros del contingente, españoles, alemanes y americanos, vestidos en su mayoría de paisano, dedicaron algunas horas a conocer el centro de A Coruña. Solicitaron información acerca de gimnasios, restaurantes, discotecas, pistas deportivas y otros servicios. Por su parte, el delegado del Gobierno en Galicia, Manuel Ameijeiras, mantuvo un encuentro privado con el contraalmirante Mahon.
Dispositivo de seguridad
El público no puede acceder al muelle de Trasatlánticos para ver de cerca los buques, debido a la activación de un dispositivo de seguridad que incluye controles en los accesos al puerto y una vigilancia permanente del recinto. Este operativo de vigilancia fue especialmente intenso en el navío de la US Army. La propia dotación del buque estableció un perímetro de seguridad mediante una serie de barreras colocadas en el agua y que servirán para salvaguardar le embarcación de un eventual ataque terrorista.