Los expertos dudan de que la pitón de Marín pueda sobrevivir en el monte

GALICIA

Afirman que las bajas temperaturas llevan a estos animales a un estado crítico.

04 dic 2007 . Actualizado a las 10:14 h.

Los especialistas en ofidios no tienen una opinión unánime acerca de la posibilidad de que en el monte del municipio pontevedrés de Marín pueda sobrevivir una pitón, cuya camisa, de 5,75 metros de largo, fue encontrada el pasado viernes junto a un lavadero en el lugar de Allariz. Desde Medio Ambiente se mantiene la tesis de que hay suficientes indicios como para tomar precauciones. Lo raro del caso tiene despistados a los biólogos, que han buscado asesoramiento en A Madroa. La Xunta cree que el animal, si está abandonado en el monte y sigue vivo, permanecerá en un estado inactivo y quizás oculto en unas ruinas.

Por otra parte, Marco Lucato, un italiano que durante doce años fue uno de los responsables del centro de estudios de reptiles y ofidios Áspid, en Bérgamo (Italia), mostró su escepticismo ante este caso. Lamentó que se hubiese alterado la zona del hallazgo antes de que un experto hubiese podido buscar un rastro y precisó que la camisa solo prueba que en alguna zona de la comarca hay un animal de esas características, quizás en un terrario. Para él, el caso se asemeja más a una broma pesada. «Las pitones son animales tropicales que viven en temperaturas de 28 y 30 grados y para los que bajar de 18 es entrar ya en un estado crítico. Si se pudiese demostrar que en Marín hay una pitón adaptada a ese medio, sería un asunto como para llamar a científicos de todo el mundo. Como para ir al Guinness , algo totalmente anómalo», recalcó.

Precisó que, si el animal está libre en la zona, no supone un peligro para los humanos, ya que comería como mucho conejos o gallinas: «Si alguien la encontrase, no debe tocarla ni acercarse, sino avisar a quien la sepa coger. No ataca al hombre y con el frío estará como paralizada». Aunque la camisa mide 5,75 metros, Lucato precisó que el tamaño real sería un tercio menor, lo que dejaría a la pitón en unos 3,5 o 3,8 metros y unos 20 o 25 kilos.

Las dudas dividen también a los vecinos. Unos creen que se trata de una broma de mal gusto y otros que la piel del animal es prueba de que merodea por la zona. Mientras no se produzcan más hallazgos, la incertidumbre sigue ahí.