«La doble dedicación de algunos médicos convierte el sistema en corrupto»

Alberto Magro

GALICIA

Este doctor denuncia que hay profesionales que agilizan la atención en la red pública a quienes acuden a sus consultas privadas

19 oct 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

El portavoz de la Plataforma de Defensa de la Sanidad Pública, Manuel Martín, ha decidido abrir la caja de los truenos: después de observar las listas de esperas presentadas hace dos días por Sanidade, arremete contra un sistema al que califica de «corrupto» por permitir que haya doctores que ejercen simultáneamente en la sanidad privada y en la pública. Por ello exige al Sergas que tome medidas contundentes si quiere combatir de forma efectiva las listas de espera gallegas.

-El efecto vacaciones de verano ha sido demoledor con las listas de espera.

-Así es. Para los médicos es un desastre, pero peor aún es para los que tienen que estar esperando a que los atiendan, en situaciones a veces complicadas.

-¿Y qué puede hacer Sanidade para hacer frente a un problema que nadie ha sido capaz de solucionar?

-Hay muchas cosas que mejorar, y algunas ya se están haciendo. Se ve por ejemplo en la lista quirúrgica una tendencia a la reducción, que responde a la voluntad de los hospitales por reducirlas. Se empieza a ver un poco la luz al final del túnel. Pero poco. Se vería más si se hicieran cosas como aumentar y mejorar la cirugía mayor ambulatoria, este tipo de operaciones poco invasivas que no precisan hospitalización y que corresponden a casi el 60% de los casos. Para ello habría que poner en marcha un plan específico en todos los hospitales, para que creasen alas específicas dedicadas a ello, con profesionales formados, con un buen servicio de hospitalización a domicilio y con servicios de apoyo exclusivo para pruebas complementarias. Eso es algo que ya se está haciendo en otras zonas de España. Y hay más cosas que se pueden hacer. Esta lista de espera sí parece la verdadera, pero sería interesante que se hiciesen públicas las demoras en las pruebas diagnósticas, porque ahí se pierde muchísimo tiempo.

-Pero el problema no es solo de quirófanos y pruebas, porque la lista de espera para las consultas con el especialista no para de crecer.

-Aumenta, es cierto. Esto quiere decir que tenemos un problema realmente grave, casi siempre además con las mismas especialidades, como oftalmología, ginecología o angiología [los que operan las varices]. Estamos castigando a nuestros mayores. Y lo de ginecología es desastroso: la lista es tan grande que parece que no se quiera dar atención ginecológica, porque se está desviando todo al sector privado. Se le está negando a las mujeres el derecho a la atención universal y gratuita, cuando, encima, en atención primaria podríamos solucionar algunas cuestiones de ginecología si tuviésemos herramientas. Podríamos hacer citologías, que no tienen ningún misterio, como prueba el hecho de que ya se están haciendo en Ourense.

-Hablaba de pacientes desviados a la sanidad privada, un tema tabú en su profesión, que parece mirar para otro lado para no ver a los médicos que ejercen en la sanidad pública por la mañana y en su consulta privada por la tarde.

-Pero es que eso está ocurriendo. Aquí hay una práctica escandalosa, que se resume en poca productividad por la mañana en la consulta púbica, para lucrarse por la tarde en la consulta privada. ¡Esto es inadmisible! ¡Que se cumpla de una vez la ley de incompatibilidades!

-El Sergas parece haber tomado cartas en el asunto, como ha ocurrido estos días con algunos doctores en Lugo.

-Sí, hay algún caso en el que se ha actuado, pero en general no se quiere ir por esa vía. No parece que el Sergas quiera incentivar la exclusividad.

-¿Cuántos médicos incurren en esa incompatibilidad?

-Hay estudios que dicen que entre el 18 y el 20% de los especialistas tienen doble dedicación, aunque habrá casos enmascarados. Los que lo hacen son minoría, pero caray, hablamos de corrupción, y no lo digo yo, sino esos estudios. Hay una evidente colisión de intereses cuando puedes hacer con lentitud tu trabajo para sacar tajada de tu consulta privada.

-¿En qué especialidades ocurre más?

-Basta observar las listas de espera. Lo de ginecología es evidente; también otorrinolaringología, reumatología... El problema es la opacidad en esta cuestión, que permite prácticas escandalosas que todos conocemos. En los hospitales concertados hay un montón de jefes clínicos que trabajan en la pública por la mañana y en la privada por la tarde, ¡y no se puede! La ley es taxativa. La doble dedicación convierte el sistema sanitario en corrupto: el paciente que va a la privada sabe que de ese modo sus esperas van a ser más cortas en la pública, que lo van a adelantar en las listas. Hay que sanear esas áreas, porque es un escándalo.