Una imputada acusa al ex alcalde de O Grove de la falsificación de las listas del PP para el País Vasco

GALICIA

28 sep 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

Una de las trabajadoras del Grupo Municipal de Intervención Rápida de O Grove (Grumir), imputada en el caso de los falsos voluntarios de las listas del PP del País Vasco, reconoció ayer ante la jueza que instruye la causa haber cubierto varias de las fichas, y que lo hizo cuando realizó labores en el Ayuntamiento de O Grove y por orden expresa del ex alcalde, el popular Miguel Ángel Pérez.

María Jesús Otero Magdalena, de 26 años, dijo estar contratada en el grupo de emergencias desde el mes de febrero, pero que en la campaña electoral trabajó como secretaria de la que entonces era concejala de Seguridade Ciudadana y, más tarde, también para el propio alcalde. En la comparecencia que ayer realizó en el juzgado como imputada, dijo que en el Grumir se encargaba de hacer guardias, pero que en el ayuntamiento «hacía un poco de todo, desde ir a comprarle unas medias a una concejala hasta realizar trabajos para un partido político», y que en esas funciones a favor del partido «solo obedecía las órdenes del señor alcalde».

La empleada municipal reconoció que los nombres y datos personales que aparecen en algunas de esas fichas los cubrió ella «de su puño y letra», pero que las firmas no eran suyas, y que todos los datos los consiguió de una carpeta que había en el despacho del regidor. María Jesús Otero no dudó a la hora de admitir que fue el ex alcalde el que le dio la orden de rellenar los formularios, ni siquiera cuando uno de los abogados le preguntó si era consciente de que estaba implicando a Miguel Ángel Pérez en un delito.

Como entre los voluntarios que no dieron su consentimiento figuran también los padres y familiares de la imputada, Otero Magdalena explicó que ella en todo momento pensó que eran para completar las listas de la candidatura del PP en O Grove, y que eso mismo creyeron sus padres cuando firmaron las fichas que ella misma cubrió, y que si llega a saber que eran para el País Vasco no lo hubiera hecho. Aseguró que todos estos trabajos los hizo coaccionada, y que «la mayoría de los trabajadores con contratos temporales antes o después fueron coaccionados para asistir a mítines». Cuando se le preguntó si sabía por qué el entonces alcalde le había encargado a ella esos trámites respondió que sería porque «no habría otra tonta a quien pedírselo».

Otras declaraciones

Las acusaciones de la trabajadora del Grumir contrastan con las que hizo el propio ex alcalde cuando a finales del mes de agosto declaró también como imputado. Entonces, Miguel Ángel Pérez aseguró no tener relación alguna con las falsificaciones y desvió la atención hacia el grupo de emergencias, ya que casi todos los falsos voluntarios eran trabajadores del Grumir o familiares del personal. El ex alcalde aseguró que se estaba «comiendo un marrón» que no era suyo. Algo parecido declaró también ayer otro de los imputados en el caso, el concejal popular Alexandre Aguín, que entonces era responsable de la campaña del PP de O Grove y concejal de Deportes.

Aguín reconoció haberse encargado de la tramitación de los voluntarios para el PP vasco, pero sostuvo que él solo tramitó la de una persona que conscientemente se presentó para formar parte de dichas listas.

En la causa figura también como imputada otra trabajadora del Grumir, María Isabel Agrelo, que negó cualquier relación con el caso.

Los falsos voluntarios tuvieron constancia de que figuraban en las listas cuando recibieron una carta de agradecimiento de la presidenta del PP en el País Vasco, María San Gil. Se tiene constancia de que hay una docena de afectados, aunque solo cinco presentaron denuncia. Todos ellos han sido llamados a declarar hoy en el Juzgado número 1 de Cambados.