El buque pesquero de bandera rusa Lafayette, que había sido denunciado por supuesta explotación de menores de origen asiático durante su paso por Navantia Ferrol, atracó cerca de las seis y media de la tarde del viernes en el puerto de La Luz en Las Palmas.
La maniobra fue presenciada por unos veinte agentes de la policía nacional y la Guardia Civil, que subieron a bordo para comprobar los pasaportes y la documentación de los tripulantes en cuanto fue posible.
Según informaron medios canarios, que citan fuentes de la investigación, en esas primeras pesquisas no se encontraron rastros de la presencia de menores de edad en la nave. Los agentes se incautaron de parte de la documentación para comprobar con más detalle si todo está en regla.
Las mismas fuentes señalaron que la investigación duró poco más de media hora, ya que la policía no puede registrar la embarcación en profundidad sin orden judicial. El Lafayette mide 229 metros de eslora, es la mayor factoría flotante de pesca del mundo, y lleva más de 200 tripulantes.
Ya por la tarde, antes de que atracase, una embarcación rápida de la Guardia Civil se acercó hasta el pesquero para realizar unas primeras comprobaciones en las que tampoco se encontró rastro alguno de la presencia de menores.
Por la noche el buque fue revisado por cuatro inspectores de pesca que intentan determinar su auténtica actividad económica. Al parecer, durante la visita no se encontró pescado dentro de la nave.
Antes de atracar en Las Palmas, el Lafayette, que ya fue investigado sin éxito por la policía en Ferrol, permaneció casi dos días prácticamente inmóvil frente al puerto.