Otra forma de pasar el verano

Paloma García FERROL

FERROL

La ludoteca y el Carballo Calero iniciaron con éxito los campamentos

05 jul 2011 . Actualizado a las 12:58 h.

El verano ya está aquí y con él, otro año más y ya van muchos, han llegado los campamentos CUFO. Su centro de batalla se reparte de nuevo en dos sedes: la ludoteca del Cantón con los más pequeños y el Carballo Calero con niños más mayores, de 7 a 12 años. Esta temporada se han hecho un poco de rogar por el cambio de gobierno, por lo que han empezado, en el caso del Carballo Calero, una semana más tarde de lo habitual. Esta iniciativa supone un alivio para los padres y horas de diversión para los pequeños, que dejan volar su imaginación con las actividades de cada día.

En el Cantón, Sandra Cendán repite tras varias ediciones y coordina todo. Primer día y a las 9.30, hora de apertura, ya está todo listo. A pesar de empezar ayer, casi han llenado el aforo, 33 niños de tres a seis años han ocupado las salas, dejando solo siete sillas libres.

Este año han sido, comenta, especialmente tranquilos, solo uno o dos niños se mostraron un poco reacios al principio y no querían quedarse. «Llevan unos días en casa con los padres y este es un sitio nuevo, pero en cuanto entran se ponen a jugar y se quedan contentos», explica.

Tienen un montón de actividades de lo más diversas pensadas para ellos. Cada día de la semana versarán sobre un tema. Ayer, lunes, toca arte. Cada niño saca el pequeño pintor que lleva dentro para plasmar su obra maestra. Colorean unas fotocopias de la serie Patito Feo o de Bob Esponja imitando el estilo de Andy Warhol. La concentración es máxima. Miguel, de 5 años, se lo está pasando bomba y reconoce que quiere repetir todos los días, y debe ser verdad ya que no levanta la vista del dibujo ni para hablar. Además, habrá cocina, manualidades, relajación y los viernes los dedicarán a preparar la fiesta que celebran el último día de cada mes. La de julio tendrá como temática la prehistoria, por lo que ya tienen que empezar a crear los decorados y preparar sus disfraces para ese día tan especial.

Mientras, los padres tienen unas horas para hacer sus recados y disfrutar de un poco de tranquilidad. Para asistir a los CUFO, no hace falta apuntarse, solo asistir a la hora.