La candidatura está integrada por el regidor, la diputada, Jaime Pena, González Laso y Gerardo López Castrillón
14 ene 2011 . Actualizado a las 12:26 h.El secretario general del PSOE ferrolano y candidato a la alcaldía, Vicente Irisarri, abandonó ayer la reunión de la comisión ejecutiva que él dirige. Lo hizo a las dos horas de que comenzase un debate sobre la lista electoral que concurrirá a las elecciones municipales de mayo. Se levantó, él y los ediles Manuel Santiago y Sandra Ríos, entre otros, cuando la diputada Beatriz Sestayo, secretaria de Organización del partido en Ferrol, propuso votar su propuesta de lista: Irisarri, número uno; Sestayo, dos; Jaime Pena, tres; Natividad González Laso, cuatro; Gerardo López Castrillón, cinco. Así hasta 25 nombres. Los demás no trascendieron.
No es desde luego la candidatura deseada por el líder del partido en Ferrol. El regidor quiere de número dos a Mercedes Carbajales y a Ramón Veloso como tres. La diputada autonómica -que hace unos meses dejó el Ayuntamiento para dedicarse a sus responsabilidades políticas como parlamentaria, pero que ahora quiere volver a Ferrol- quedaría relegada a los últimos puestos.
Mientras Irisarri abandonaba la sede del PSOE, sobre las diez y media de la noche, los demás miembros de la ejecutiva socialista retomaban la reunión y votaban. La lista con Sestayo como número dos quedó aprobada, y ahora, dicen fuentes de esa ejecutiva, se convocará asamblea de militantes para el día 21.
Sin embargo, la validez de ese acuerdo de la ejecutiva -tomado sin el cabeza de lista y secretario general- está en entredicho pues, según algunas fuentes, es «irregular» porque incumple las instrucciones de los estatutos del PSOE. Un documento enviado por el comité federal del partido y por el secretario de Organización del PSdeG-PSOE establece que debe mediar el consenso entre el candidato y la ejecutiva para sacar adelante una lista electoral.
El acuerdo adoptado ayer por la ejecutiva quedaría de ese modo invalidado y podría tomarse la decisión de revocarlo. Todo este cisma socialista ocurre cuando quedan cuatro meses para las elecciones.
Irisarri declinó realizar cualquier tipo de declaraciones. Mientras, este periódico intentó varias veces ponerse en contacto con Sestayo para conocer de primera mano su versión de los hechos, pero sin éxito.
Fuentes oficiales del PSOE local se limitaron a explicar que se había votado una lista, que esta se había aprobado, y que se convocaría asamblea para el día 21. Sin más, «por respeto a la militancia».
Ronda de contactos
El regidor contaba con que la reunión de la ejecutiva de ayer iniciase una ronda de contactos internos para tratar de llegar a una candidatura de consenso entre las dos sensibilidades y evitar más encontronazos. Había margen, pues el PSOE amplió hasta el 13 de febrero el plazo para que las agrupaciones locales de las ciudades gobernadas por socialistas aprobasen sus candidaturas. Sin embargo, Sestayo y buena parte de la ejecutiva prefirió no esperar más e «imponer» su equipo al candidato. La diputada esgrime un acuerdo tomado hace unos meses con Irisarri según el cual le cedía el primer puesto de la lista (y se evitaban primarias) a cambio de que ella confeccionase el resto de la candidatura. Con el tiempo, el alcalde dio por roto ese pacto.
En último término y si la tramitación de la candidatura sigue su curso con la oposición del número uno podría llegar a intervenir el comité de listas de la dirección nacional del PSOE.