El «Farruquiño» de Torrente Ballester vuelve a las librerías

B. Antón FERROL/LA VOZ.

FERROL CIUDAD

Embora reedita una obra que, según Tucho Calvo, «retrata» a la perfección el Ferrol de principios de siglo

17 dic 2010 . Actualizado a las 12:31 h.

Farruquiño, una de las primeras obras de Gonzalo Torrente Ballester, vuelve a ocupar un hueco en las estanterías de las librerías por obra y gracia de Edicións Embora.

El sello ferrolano acaba de lanzar al mercado la tercera edición de una obra que ya cuenta con otras dos versiones anteriores (una del año 1954, cuando se publicó por primera vez, y otra de finales de los años 80), pero de las que apenas quedaba rastro en los establecimientos convencionales. De ahí la importancia de esta nueva edición -de tapas duras, con papel de calidad y corregida en colaboración con el hijo menor del escritor, José Miguel Torrente,- para reencontrarse con este relato de la primera etapa literaria del autor de Los gozos y las sombras.

Pese a que don Gonzalo la escribió cuando ya tenía 44 años, en opinión del periodista y escritor Tucho Calvo, Farruquiño no deja de ser una «novela de xuventude» que bebe de las «vivencias infantís» del escritor, pero «sen caer no mal gusto de contar cousas da súa vida personal».

En Sargadelos

Calvo, que ayer participó en la presentación del libro en la galería Sargadelos, recalcó que se trata de una obra que, si bien no alcanza las cotas de La saga/fuga de JB o Fragmentos del Apocalipsis , sí resulta «interesante» por la perfecta radiografía que ofrece del Ferrol de hace un siglo, «con unha sociedade de fidalgos e cabaleiros que é idéntica á que coñeceu Gonzalo Torrente Ballester».

Además, y pese a que el autor siempre negaba que sus obras tuviesen tintes autobiográficos, Calvo está convencido de que Farruquiño tiene mucho de la vida de Torrente y de los miembros de su familia -entre ellos, de su abuelo Eladio-, al tiempo que refleja con nitidez la sociedad «pechada e chismosa» que anidaba por aquellos años en Ferrol.

En su opinión, se trata de un drama «cun esquematismo estructural que funciona moi ben para a lectura» y que, además, retrata perfectamente «os personaxes e a sociedade da época». «De feito -anota Calvo-, Farruquiño evócame tanto Ferrol como hai xa bastantes anos me pasou ao ler La boda de Chon Recalde ».