Un centenar de niños de educación infantil del Couceiro Freijomil se quedaron ?ayer sin clase por las inundaciones que causaron las lluvias en el centro eumés
20 nov 2010 . Actualizado a las 02:00 h.Para recorrer el colegio Couceiro Freijomil de Pontedeume ayer era imprescindible calzarse unas catiuscas. Las lluvias caídas en los últimos días -que causaron graves desperfectos en el centro- dejaron durante el día de ayer sin clases a cerca de un centenar de niños de educación infantil. Por su seguridad, las asociación de padres decidió suspender la jornada escolar a la espera de que se ponga solución a las filtraciones, goteras, caídas de techos e inundaciones que se registran ya con demasiada frecuencia en las instalaciones.
Y es que a pesar de que el inmueble se recepcionó hace poco más de un año, no es la primera vez que se encharcan los pasillos y las aulas. Los padres y los profesores aseguran estar desesperados ante lo que aseguran es un defecto de obra que necesita una solución global. «No queremos que cada vez que entra el agua en el colegio vengan a poner parches, no podemos estar dando partes de incidencias constantemente», denunció la directora del centro, Natalia Ucha. Y es que la paciencia también se desborda en el colegio eumés después de haber tenido que trasladar a los pequeños en varias ocasiones pues la lluvia se empeñó en formar parte de las lecciones.
Una de las incidencias más graves tuvo lugar el pasado octubre, cuando una inundación anegó de aguas fecales el colegio. El Concello ordenó entonces una desinfección de emergencia para que los niños pudieran regresar a las aulas.