El instituto Concepción Arenal dice adiós a ocho profesores «históricos»

B. A. FERROL/LA VOZ.

FERROL

15 nov 2010 . Actualizado a las 13:01 h.

En el aula, cada uno tenía su carácter, su particular forma de explicar la materia, pero había algo que los ocho compartían: una vocación innata por la enseñanza y el amor a la profesión. Eso es lo que cuentan quienes trataron, bien como alumnos bien como compañeros de trabajo, a los profesores del Concepción Arenal Bernardo Maiz (Historia), José Luis de Castro y Emilia López (Matemáticas), Delia Vázquez y Mari Carmen Bilbao (Lengua española), Pilar Maceiras (Inglés), Ángeles Martínez Íñiguez (Física y Química) y Mari Carmen Rodríguez (Ciencias). Los ocho forman parte de una generación emblemática del centro y los ocho fueron homenajeados el pasado viernes en el Pazo do Monte con motivo de su jubilación.

La despedida contó con la asistencia de unos ochenta docentes y ex docentes del Masculino y fue de lo más emotiva. En el transcurso del acto se proyectó un vídeo con imágenes de cada uno de los homenajeados y se escucharon hasta diecisiete discursos, ocho de ellos salidos de boca de los protagonistas de la noche, mientras que otros tantos corrieron a cargo de compañeros que les dedicaron sentidas laudatios .

También quiso pronunciar unas palabras durante el acto el actual director del instituto, Guillermo Pedreira, para quien los compañeros que ahora se jubilan son unos auténticos «históricos» del Concepción Arenal, donde recalaron en una época «clave» para la enseñanza española. «Llegaron al instituto justo cuando finalizaba la dictadura y todos tenían claro que la educación debía ser un motor de transformación social», anota el director del centro.

Como las de Pedreira, en la cena celebrada en el Pazo do Monte también se pudieron escuchar otras muchas palabras de admiración y elogio hacia los ocho profesores que se despiden de las aulas. Eduardo Fra se las dedicó a Bernardo Maiz; Saturnino Queipo ensalzó la labor de Pilar Maceiras; y Ángeles Seoane alabó el trabajo realizado por Delia Vázquez y Carmen Bilbao.

También recibieron piropos Emilia López y José Luis de Castro, en este caso por parte del catedrático de Matemáticas Alejandro Rey, mientras que Andrés Lamas le dedicó su laudatio a Mari Carmen Rodríguez y el profesor Francisco Gallego, a Ángeles Martínez Íñiguez.

La velada se alargó hasta las tres de la madrugada con muchas risas, anécdotas rescatadas del pasado y alguna que otra lágrima. Y es que más de dos décadas de trabajo en el mítico Masculino -y en algunos casos hasta más de treinta- no son para menos.