Por primera vez, el Concello de Ferrol dispone de datos contrastados para conocer los movimientos de tráfico, tanto de entrada y salida en la ciudad, como de desplazamientos internos. En cifras concretas, en un solo día acceden al municipio cerca de 50.000 coches (49.501, exactamente, según un reciente estudio de aforos realizado por la Concellería de Tráfico).
En meses pasados, se instalaron sistemas de medición en más de sesenta calles, avenidas y carreteras de la ciudad. Y los datos recabados confirman que el Acceso Norte de la autopista AP-9 es la vía prioritaria para los conductores. El 38% de los vehículos que se dirigen a Ferrol (unos 19.000) fueron contabilizados en esa carretera.
El puente de As Pías es la segunda opción. Registra a diario algo más de 13.600 coches, un 10% menos que la autopista. Mientras que la tercera alternativa, la carretera de Castilla, es la elección de otros 9.700 vehículos (un 20% del total diario).
Queda en último lugar Catabois, que recibe el tráfico procedente de la autovía AG-64 (Ferrol-Vilalba) y de la carretera de Meirás, y suma el 14% (7.100).
Todo lo que entra, no sale. La medición de tráfico realizada por la concejalía de López Castrillón no solo se ciñó a los viajes de entrada en la urbe; también recoge los aforos de salida. En ese sentido, se detecta un déficit de 5.000 vehículos diarios respecto a los tránsitos de entrada. Es decir, cerca del 10% de los coches que acceden a Ferrol se quedan en la ciudad.
También la autopista es la vía preferida en este caso, con algo más de 15.200 viajes; seguida de As Pías (13.645), la carretera de Castilla (9.776) y Catabois (6.011). Y en este apartado se detecta también un volumen importante de coches por el enlace de la avenida Nicasio Pérez, la calle principal del polígono de A Gándara, en dirección al Arquitecto Marcide y a la incorporación a la autopista de Basanta. En ese punto se contaron más de 17.000 coches al día.
Avenidas de distribución. La mayor parte del tráfico que se registra en la ciudad sigue un patrón, enfila hacia el casco histórico. ¿Pero cómo se reparte la circulación? Ferrol cuenta con varias avenidas que son ejes de comunicación interna entre barrios como las carreteras de Catabois y Castilla. Los datos recabados en distintos puntos kilométricos de las mismas calzadas revelan apuntes muy esclarecedores al respecto.
Entre As Pías y la Trinchera. Empezando por los accesos más al sur del municipio, la avenida de As Pías, en la que entran desde el puente casi 14.000 coches diarios, pierde demanda en dos puntos antes de desembocar en la carretera de Castilla. El primer desvío se produce en la rotonda que comunica con el polígono de A Gándara y la avenida do Mar. Pero su mayor interacción está en la incorporación hacia la Trinchera, vía más directa para llegar a Esteiro. Propicia esto que a la plaza de Porta Nova lleguen unos 3.000 vehículos menos de los que cruzan el puente sobre la ría.
La carretera de Castilla, rodeada de barrios. Revela el mismo análisis del tráfico que la carretera de Castilla se ha convertido en la perfecta vía de distribución para trayectos cortos. Está flanqueada por tres grandes barrios (San Xoán, O Inferniño y Ultramar), en los que deja casi la mitad del tránsito que recoge en el límite con Narón, bajo el puente de las Cabras. Y lo mismo sucede a la inversa, pues se llegan a incorporar en dirección al concello vecino unos 4.000 coches más de los que salen del entorno de la plaza de España.
Entre la Trinchera y Esteiro. En cuanto a los movimientos de coches dentro del municipio, también destaca la avenida de la Trinchera como vía de reparto de la circulación hacia el centro de la ciudad. Registra a diario más de 12.200 viajes en cada sentido. Por su parte, la avenida de Esteiro reparte ese tránsito entre la avenida principal y la circunvalación, juntas suman unos 13.000 coches en dirección Ferrol.
Las salidas de la autopista. Si bien la AP-9 trae a Ferrol más de 19.000 coches diarios, solo la mitad desembocan en el puerto y en el paseo de la Marina. Otra parte importante enfila hacia el centro por la carretera de Catabois, cuyo volumen de tráfico se incrementa notablemente según se acerca al casco urbano desde la zona del Arquitecto Marcide. Tanto las incorporaciones de la autopista como el tránsito natural de ese barrio generan más de 10.000 coches diarios en las proximidades de la plaza de Canido.
Pese a esto, no todos los vehículos contabilizados entran por el mismo sitio en A Magdalena, sino que se reparten por las calles Coruña (5.532 coches al día) y Concepción Arenal (3.215).
Aglomeración frente al Jofre. En el barrio histórico, el premio a las zonas más transitadas se lo llevan la plaza de Galicia (entre el Jofre y Correos pasan casi 9.000 vehículos de entrada al centro, y otros 16.500 de salida). Es la principal opción para abandonar el casco. En segundo término está la calle Rochel. Del Callao a la plaza de España se desplazan a diario cerca de 8.700 coches, más que en la avenida de Esteiro. Calles interiores como Sol o Lugo apenas pasan de 5.000 vehículos, y lo mismo sucede en la parte interna de los ensanches.