«En México se ha llegado a utilizar Internet para cometer un secuestro, y yo cerré mi cuenta por eso»
FERROL
Hoy en día, el fútbol es un elemento más de los que contribuyen a generar opinión pública, y Andrés Guardado es un referente en su país de origen, como cualquier futbolista del más alto nivel.
-Es inevitable comentar la trágica muerte del secretario de Gobernación de México, Juan Camilo Mouriño, hijo del presidente del Celta, y todas las sospechas acerca de ese accidente.
-No conviene pronunciarse sobre eso, porque se trata de temas demasiado complejos.
-¿Cree que en España se toma verdadera conciencia del arraigo de la violencia en su país?
-Creo que no. En México, desgraciadamente da mucha tristeza saber que se dan este tipo de situaciones extrañas. Y no es la primera vez. Esta vez ha alcanzado notoriedad porque se trató de una persona de renombre, alguien que era muy importante para mi país. Y aquí, por su vínculo con el Celta y con Galicia.
-¿Era importante Mouriño para México por su acción contra el narcotráfico?
-Claro, pero es complicado hablar del tema. No se quiere uno mojar y meterse en eso.
-¿Cree que ustedes en Europa están libres de la sombra de la delincuencia mexicana?
-No estamos libres de nada. Desafortunadamente para el país, las cosas están muy graves ahora mismo. Te pongo un ejemplo. El Facebook , que ahora está muy de moda, ha sido utilizado en México para cometer secuestros. Imagínate. Conoces a gente por el Facebook y acabas siendo secuestrado. Yo mismo cerré mi cuenta de Facebook , porque uno nunca sabe si el día de mañana... porque si entra alguno de mis familiares y saben que tengo a mi familia allá.
-¿Quizás ustedes son un objetivo probable, por sus recursos económicos?
-Sí. Ahora, con la crisis, falta dinero y cosas así. Y cuando saben que alguien tiene dinero, tratan de ir a por él, porque saben que le pueden sacar dinero. Es muy difícil. Es un tema muy delicado.
-¿Su prioridad es, entonces, su seguridad?
-Claro. Por eso digo que no quiero saber nada del tema, que no quiero opinar. Le doy el pésame a los familiares y nada más. No me gusta meterme.