La situación es más elevada en el caso de los chicos, ya que casi 87 de cada 100 siguen con sus familias
01 jun 2008 . Actualizado a las 02:00 h.Irse de casa es una asignatura aún pendiente para casi 19.000 vecinos (18.939 en concreto) de la comarca de Ferrol que aún residen en la misma casa que sus padres. Comparten todos ellos una edad comprendida entre los 18 y los 30 años y una misma situación domiciliaria. No son una excepción. Sobre el conjunto de la población de la zona suponen el 82,5% del total de esa generación, conforme al último informe sobre condiciones de vida del 2007 que acaba de hacer público el Instituto Galego de Estatística (IGE).
Son más que la media de Galicia, que ya está por encima del conjunto de España, si se cruzan esas referencias con las que da el Observatorio Joven del Consejo de la Juventud. Porque mientras en Ferrolterra ese porcentaje es del 82,5%, en la comunidad ese guarismo se queda en algo menos del 77%. Es decir, hay cinco puntos de diferencia. Para toda España, en ese mismo tramo de edad casi la mitad de los chavales están independizados, y los números avanzan conforme se va hacia los 35 años.
La situación es algo diferente si se separa por sexos. Casi el 87% de los hombres entre esos 18 y 30 años siguen aún en el hogar familiar, porcentaje que cae hasta el 78,6% en el caso de las mujeres. Es decir, ellas, aunque en ese tramo de edad son algo menos (un 49% del total de la población joven), logran irse de casa con más frecuencia. Siguiendo ese desglose de datos del IGE, también se revela que un 65% de los que siguen en la casa familiar lo hacen en un hogar formado por una pareja con hijos, otro 15% en una vivienda monoparental (solo con su padre o solo con su madre) y el resto, bajo otras formas de convivencia no detalladas.
¿Dónde hay que buscar las causas? En la economía y en el empleo, contingencias ligadas. El propio Consejo de la Juventud aporta como gran motivo los ingresos, con apenas un 24% de esos jóvenes con contrato laboral indefinido; y unos ingresos anuales que para un joven gallego oscilan entre los 10.600 y los 13.400 euros. Aunque demanda hay entre los jóvenes para irse: un 36% de los contratos de alquiler subvencionado de la Xunta en Ferrol son de jóvenes.