Los tribunales han absuelto a un hombre de 46 años, que había sido acusado por el Ministerio Fiscal de un delito de impago de pensiones, por no hacer frente al abono de la cuantía mensual que se le asignó para su hijo, tras su separación. Según la sentencia, el alcoholismo crónico que sufría Jesús Antonio Pérez Varela le impidió recordar su compromiso.
La pensión alimenticia a favor de su hijo fue fijada en un 25% de sus ingresos mensuales. La resolución judicial que fijó estas prestaciones fue de julio del 2003. Pues bien, entre diciembre de ese año y junio del 2004, a pesar de que el inculpado estuvo trabajando, no abonó cuantía alguna. Aunque, en diciembre del 2004 saldó todas las cantidades adeudadas a su ex pareja por el mencionado concepto.
Rehabilitado
El Juzgado de lo Penal número 1 señala en su sentencia que en aquel período el hombre padecía un alcoholismo muy fuerte por el que estuvo, incluso, ingresado en el hospital. De tal manera que no era consciente de lo que hacía.
Pero consiguió romper esa dinámica merced a la ayuda que recibió sobre todo los dos años que pasó en un programa de rehabilitación del alcoholismo. Tras lo cual afrontó su responsabilidad. Su situación actual ha cambiado diametralmente hasta el punto de que su ex esposa pidió que no se le castigara y renunció a toda reclamación.