El jardín del Pazo da Marquesa se abrirá al uso público este mes

la voz | ferrol

FERROL

CÉSAR TOIMIL

San Sadurniño El recinto se cerrará por las noches por seguridad El Concello volverá a negociar la cesión del edificio con el nuevo obispo de Mondoñedo-Ferrol

02 jul 2005 . Actualizado a las 07:00 h.

?ras una larga espera, los vecinos de San Sadurniño podrán disfrutar al fin de los jardines del Pazo da Marquesa. El Concello, que a finales del año pasado alcanzó un acuerdo para abrir al público la zona verde, prevé que el recinto esté listo para recibir a sus primeros visitantes ya a mediados del mes de julio. Así lo ha anunciado el alcalde, Constantino Bedoya (PP), quien aseguró que la próxima semana se realizará una nueva corta de césped y se instalarán papeleras para que los vecinos encuentren los jardines en las mejores condiciones posibles. «En los últimos meses -asegura Bedoya- se ha tenido que trabajar muchísimo, porque aquello estaba hecho una auténtica selva». El alcalde recordó que ésta será la primera vez que los jardines se abran al uso público y anunció que el recinto estará abierto a diario, pero cerrará por las noches «por motivos de seguridad». Tras haber logrado que los jardines puedan ser disfrutados por todos los vecinos, al Concello le queda aún otro reto por conquistar: conseguir que las Hijas de Cristo Rey cedan también el pazo para su uso público. Negociaciones Bedoya recordó que la negociación se entabló hace ya algunos meses con el obispo de la diócesis Mondoñedo-Ferrol, Gea Escolano, pero que, ahora, tras su marcha, será preciso iniciar las conversaciones con su sustituto, monseñor Sánchez Monge. La intención del Concello es que el edificio se pueda destinar en el futuro a fines sociales. Bedoya considera que el pazo podría albergar, por ejemplo, una guardería o un centro de la tercera edad. El pazo forma parte de un enclave monumental que también integran construcciones como la iglesia de Santa María la Mayor del Rosario, situada a unos cien metros del edificio que en su día se utilizó como residencia de la marquesa de San Sadurniño.