La ventaja del PP sobre el PSOE se amplía a 7,9 puntos, según el CIS

Tino Novoa REDACCIÓN/LA VOZ.

ESPAÑA

El pesimismo se adueña de los españoles, que suspenden a todos los políticos y creen que la economía empeorará

06 nov 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

El último barómetro electoral del CIS, publicado ayer sobre un trabajo de campo realizado en vísperas de la remodelación del Gobierno, confirma que la crisis fue un movimiento desesperado de Zapatero para intentar detener y corregir un deterioro que está hundiendo al PSOE hasta sus mínimos históricos. El sondeo amplía la distancia entre populares y socialistas a 7,9 puntos, la mayor desde que Zapatero es presidente.

Con todo, lo peor para los socialistas es que no se trata de una foto fija en un mal momento, como argumentó ayer el Gobierno, sino la confirmación de una tendencia negativa, ya que la diferencia va en aumento: 1,6 puntos más que en el barómetro de agosto. En tres meses, con la primera huelga general contra Zapatero de por medio, las expectativas electorales del PP han mejorado un punto (de un 41,2% a un 42,2%) mientras que las del PSOE han empeorado siete décimas (de un 34,9% a un 34,3%).

Un porcentaje de voto que se sitúa solo dos puntos por encima de los peores resultados obtenidos por Felipe González, en las encuestas de mediados de 1995, coincidiendo con lo más profundo de la crisis económica de los noventa. El histórico líder socialista llegó a estar más de once puntos por debajo de José María Aznar antes de los comicios de 1993, que acabaría ganando inesperadamente. Y aunque en los de 1996 no logró dar la vuelta a las encuestas, lo cierto es que recuperó en poco más de medio año una distancia superior a la que ahora separa a Zapatero de Rajoy.

Pero es casi la única referencia positiva para el presidente. Ya que prácticamente todos los datos del barómetro pintan un panorama desolador para el PSOE. El índice de popularidad de Zapatero sigue desgastándose mes a mes. Y aunque continúa por delante de Mariano Rajoy, lo aventaja ya solo en cuatro centésimas. Pero el líder de la oposición va mejorando, por lo que si se mantiene esta tendencia, en el próximo barómetro ya estará por delante. Al igual que prácticamente la totalidad de los ministros (solo González Sinde y Sebastián tienen peor nota).

Por si aún queda alguna duda, un 81,4% de los españoles tienen poca o ninguna confianza en Zapatero. Su consuelo es que la desconfianza hacia Rajoy es aún mayor (81,5%). Lo que resume el descrédito general de los políticos: ninguno llega al aprobado y, en conjunto, son el tercer motivo de preocupación de los españoles.

La explicación hay que buscarla en la sensación de pesimismo generalizado que se desprende de la encuesta. Dos de cada tres españoles califican de mala o muy mala la situación económica. Lo peor es que un 90,2% consideran que es igual o peor que hace un año, y solo uno de cada diez confía en que mejore en los próximos doce meses. Y un dato final: más del 90% de los españoles califican de regular a muy mala la gestión del Gobierno.