Muchos barones del PSOE le recuerdan que con la remodelación no está todo hecho
24 oct 2010 . Actualizado a las 02:00 h.Es difícil pensar qué habría pasado ayer en el comité federal del PSOE si José Luis Rodríguez Zapatero no hubiera dado la vuelta a su Gobierno para, de golpe y plumazo, conformar el Gabinete más político de cuantos ha tenido nunca, pero lo que es obvio es que el encuentro habría rezumado tensión. La prueba es que los barones socialistas que el próximo 22 de mayo se presentan a unas complicadísimas elecciones autonómicas llegaron a la sede de la calle Ferraz aún en pleno proceso de descompresión. El debate de los notables del partido estuvo próximo a ser el paseo militar que Zapatero había previsto al redactar su discurso. «Sé que queríais impulso e iniciativa y he hecho todo el esfuerzo para que nos dure un año y medio; ahora que os veo más motivados sé -coligió- que el apoyo y la fuerza van a ser aún mayores». Sin embargo, tampoco hubo entusiasmo desbordante.
«Rajoy se ha puesto de perfil [ante la crisis] porque no tiene perfil de líder político», «solo hay que ver las caras del PP para comprobar que hemos acertado» y «hemos pillado por sorpresa a Rajoy, lo cual no es ninguna sorpresa», fueron algunos de los dardos dialécticos que lanzó Zapatero al jefe de la oposición.
No es que los dirigentes territoriales no apreciaran un gesto tan demandado, sino que muchos consideran que con este cambio de Gobierno no está todo hecho.
El presidente de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, reprochó a Zapatero que no contara con los secretarios regionales en el relevo de Leire Pajín al frente de la secretaría de Organización. Él, como otros muchos, se enteró a cosa hecha y por los medios de comunicación de que el cargo recaería en el presidente de Aragón, Marcelino Iglesias.
Locales y autonómicas
Entre algunos barones existe cierta sensación de que la mirada del secretario general de los socialistas estaba ayer puesta en las legislativas del 2012, pero no tanto en las más inmediatas locales y autonómicas que, a juicio del presidente castellano-manchego, José María Barreda, tendrán «cariz de generales» por lo mucho que en ellas se juega el PSOE y el Gobierno.
Iglesias, en su primera intervención como número tres socialista, constató que este es el comité federal de la remontada, dijo que Zapatero «está más fuerte que nunca» y prometió, a petición del secretario general, «subir de revoluciones el funcionamiento» del PSOE, informa Efe. El comité federal aprobó ayer los nombres de los cabezas de lista para doce comunidades autónomas que celebran elecciones en mayo y para 113 capitales de provincia y ciudades de más de 50.000 habitantes.