Garzón acusa de parcial al juez Varela y pide que se anule la causa

ESPAÑA

El magistrado del Supremo expulsa del procedimiento a Falange por no corregir en plazo su denuncia

24 abr 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

La defensa de Baltasar Garzón pidió ayer la nulidad de las últimas resoluciones dictadas por Luciano Varela como instructor de la causa que se sigue contra el juez de la Audiencia Nacional en el Tribunal Supremo por un presunto delito de prevaricación derivado de la investigación de los crímenes del franquismo. El magistrado imputado considera que la decisión del instructor de sugerir a las acusaciones populares -Manos Limpias y Falange Española- una serie de correcciones y modificaciones en sus escritos para que pudieran ser admitidos, implica una intervención «parcial» del instructor en el proceso «por vulnerar de forma clara y decisiva la imprescindible neutralidad e imparcialidad que debe presidir la labor de un instructor».

Este recurso de apelación por nulidad de actuaciones coincide en el tiempo con la decisión de Luciano Varela de apartar del proceso a Falange Española por no haber presentado dentro del plazo -24 horas- un nuevo escrito de acusación con las correcciones requeridas. Falange anunció ayer en un comunicado que recurrirá el lunes la decisión del instructor.

Sobre la decisión del instructor de requerir a Falange para que subsanase los defectos apuntados -suprimir «múltiples valoraciones» y «constantes referencias a circunstancias personales del acusado»-, la defensa de Garzón considera que «no se encuentra amparada en ningún precepto de la normativa procesal vigente, y es manifiestamente ajena a las normas esenciales del procedimiento».

En cuanto al escrito de acusación de la representación de Manos Limpias, el letrado de Garzón señala que «la intervención del instructor llegaba al extremo de indicarle a esta acusación qué páginas concretas de su escrito debía excluir».

Contra el derecho de defensa

Como quiera que estos dos escritos de acusación cuestionados son los únicos que sostienen el proceso -el fiscal no acusa y los firmantes de la querella de Dignidad y Justicia no fueron admitidos como acusación independiente-, la defensa del imputado insiste en que la intervención del instructor en el contenido material de los escritos de acusación «quiebra las normas esenciales del procedimiento» y lesiona el derecho de defensa.

Entiende la defensa de Garzón que la actuación de Luciano Varela vulnera el principio acusatorio porque «decide incorporar su jurisdicción nada menos que al contenido de una acusación o a la forma en la que se han de redactar unas calificaciones provisionales».

Sobre el alcance de la nulidad de actuaciones, el recurso dice que los escritos de acusación cuestionados son «completamente ineficaces y carentes de valor alguno». A título de ejemplo, cita que a Manos Limpias el instructor le ha requerido que excluya de su escrito de acusación original los dos tercios, es decir, 50 de sus 74 páginas, «lo que da idea -explica el recurso- de la relevancia de los defectos encontrados».

Abundando en su contenido, aclara «que el vicio procesal más relevante de esta acusación es que se ha limitado en su escrito a reproducir literalmente, en una buena parte, el contenido del auto dictado por el instructor el 3 de febrero del 2010, con lo que convierte de forma indebida el tenor de dicha resolución en contenido acusatorio».

En cuento a la iniciativa de Luciano Varela de sugerir correcciones a los escritos de las acusaciones, fuentes jurídicas ajenas al proceso consultadas ayer por La Voz señalaron que se trata de un hecho sin precedentes. Llegaron a calificar la decisión de «anómala, extraña y extravagante».