El PP encabezó la oleada de críticas contra la forma en la que el Gobierno gestiona la crisis provocada por la imposibilidad de que Aminatu Haidar retorne a Marruecos. El diputado popular José María Lasalle aseguró que España tiene que responder adecuadamente a la «escalada de tensión» alimentada por la negativa del país vecino a permitir la entrada de la pacifista en su territorio y cree que el Gobierno tiene que cambiar su estrategia y actuar «de forma inteligente, pero contundente». El portavoz parlamentario del PP en temas de extranjería, Rafael Hernando, describió la situación como «un esperpento» y «una tomadura de pelo» al Gobierno, al que señala como el responsable de lo ocurrido. En su opinión, «Marruecos se está acostumbrando a torear a España», que en este y otros asuntos de política internacional hace «un papelón».
El presidente canario, Paulino Rivero, fue más prudente, porque pidió suspender la crítica hasta que se resuelvan las negociaciones diplomáticas, pero no más benévolo, ya que anticipó que el papel del Ejecutivo en este asunto es «bochornoso». El secretario general del PCE, Luis Centella, se unió a las peticiones de «contundencia» al Gobierno y reclamó que la Unión Europea suspenda los acuerdos bilaterales preferentes que tiene con Marruecos para aumentar la presión.
El presidente de la Federación de Instituciones Solidarias con el Sáhara, Carmelo Ramírez, declaró que si Zapatero «no resuelve rápidamente» la situación de Aminatu Haidar «será el hazmerreír», ya que «después de la burla» de Marruecos con el viaje frustrado de la activista el caso «se ha convertido en un asunto de Estado».
Protestas internacionales
Responsables de la ONU y la Unión Africana insistieron ayer en la necesidad de que se permita el retorno de Haidar, y Amnistía Internacional ha comenzado una campaña mundial para bombardear con mensajes de protesta al rey marroquí y a su primer ministro. El presidente de la Comisión de la UA, Jean Ping, señaló en un comunicado que el organismo panafricano «se une a otros actores internacionales para pedir que las autoridades marroquíes permitan a Haidar regresar al Sáhara.