La activista saharaui Haidar hizo caso omiso a lo que la plataforma que la apoya calificó de «pura intoxicación» de Marruecos.
03 dic 2009 . Actualizado a las 14:01 h.La activista saharaui Aminatou Haidar hizo ayer caso omiso a lo que la plataforma que la apoya calificó de «pura intoxicación» de Marruecos, cuyo cónsul en Canarias, Abderramán Leibek, aseguró que si Haidar pide perdón al rey Mohamed VI por «el acto de traición a su patria» cometido al negarse a reconocer la nacionalidad marroquí, se le podría expedir un nuevo pasaporte «en media hora». El portavoz de la plataforma de apoyo a Haidar, que ayer cumplió su decimoséptimo día en huelga de hambre, aseguró que la activista no tenía intención de contestar al cónsul.
El ministro de Exteriores marroquí, Taib Fasi Fihri, indicó que no ve por qué deberían hacerse esfuerzos para devolver a Haidar sus documentos. «Haidar entregó su documentación, y cuando alguien entrega algo, no veo por qué deberían hacerse esfuerzos para que se le devuelva», recalcó.