El PP aumenta las sanciones por faltar al Parlamento

Magis Iglesias

ESPAÑA

31 oct 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Ausentarse de los plenos saldrá más caro a los diputados del PP. La portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, decidió ayer, tras la ausencia el miércoles de uno de sus diputados en la sesión de control, endurecer el régimen sancionador de su reglamento interno, aumentar las multas por ausencias, penalizar el absentismo en todas las sesiones y aplicar el agravante de la reincidencia.

Sáenz de Santamaría se declaró abochornada cuando tuvo que disculparse por los numerosos escaños vacíos de las filas populares en la sesión de control al Gobierno, que resultó mutilada porque el diputado que debía pedir explicaciones al ministro de Economía por la elevada cifra del paro no se encontraba en el hemiciclo. «Soy la portavoz de ese grupo al que nos han dado un encargo los ciudadanos y que ayer, y pido disculpas por ello, hemos defraudado», dijo Sáenz de Santamaría en declaraciones a Antena 3.

También su jefe de filas, Mariano Rajoy, hizo autocrítica y reconoció que «no hay excusas» para justificar la ausencia de muchos parlamentarios del pleno de control, y la suya propia porque tampoco asistió. «La gente tiene derecho a quejarse», admitió, y prometió que procurará «que eso no vuelva a ocurrir». Para que no se repita el incidente y acabar con la habitual ausencia de parlamentarios en sus escaños, la portavoz y el equipo de dirección del grupo ya trabajan en una profunda reforma del reglamento interno.

Se actualizarán y encarecerán las cuantías de las multas, tanto las de las ausencias como las de incumplimiento de la disciplina de voto. La aplicación de la sanción será automática, como ocurre en la actualidad en el Senado, donde los parlamentarios que no justifican su inasistencia a una votación deben pagar la correspondiente penalización económica sin que medie resolución previa, como se exige actualmente en el Congreso.

Los diputados tendrán que firmar en cada pleno para demostrar su asistencia a todas las sesiones; no bastará con estar presentes en las votaciones. Hasta ahora, esta exigencia solo se planteaba en las comisiones y, recientemente, la dirección del grupo la había extendido también a las interpelaciones.

Pero la novedad del nuevo régimen será la tipificación de la reincidencia, que no solo incrementará las multas de los que se ausenten repetidamente de las votaciones, sino que castigará a los absentistas recalcitrantes en todo tipo de debates. Así, la dirección del Grupo Popular espera conseguir una nutrida presencia en sus bancadas en las sesiones de control al Gobierno. Sáenz de Santamaría dejó muy claro que no pondrá paños calientes a los diputados poco trabajadores y dijo que «el que no quiera trabajar» o «el que no quiera venir, que renuncie a su escaño».