La empresa asegura que el decreto del carbón no impactará en sus centrales
23 feb 2011 . Actualizado a las 06:00 h.La última subida de la luz, que ha comenzado a verse en los recibos que han llegado a los domicilios en las últimas semanas, puede ser solo el principio. El consejero delegado de Gas Natural Fenosa admitió ayer que las tarifas pueden volver a revisarse al alza en la subasta energética de marzo «si siguen creciendo las renovables» con sus subvenciones, con un precio más alto.
Durante la presentación de los resultados del 2010, Rafael Villaseca avisó de que «el agujero» del déficit energético -la deuda generada porque la luz estuvo congelada durante años- «no puede seguir creciendo», aunque eludió concretar en qué proporción podría subir la luz.
El ejecutivo también justificó la retirada del recurso de la eléctrica al decreto del carbón porque, apuntó, no tendrá incidencia sobre las centrales que tiene la empresa, como la de Cerceda en el caso gallego, aunque el problema está, principalmente, en las firmas auxiliares. Villaseca aseguró que se está a la espera de ver cómo se desarrolla ese decreto.
La compañía cerró el 2010 con un beneficio neto de 1.200 millones de euros, prácticamente el mismo resultado que en el 2009, pese a registrar una mayor de demanda de electricidad (un 3,2%) y gas (un 0,3%) y una mejora de ingresos del 32%. En el resultado, según apuntó la compañía, han penalizado las provisiones que ha incorporado para cubrirse ante una posible resolución negativa en su conflicto con Sonatrach, una firma con la que en Galicia participa en la planta de gas de Reganosa. El laudo entre las dos compañías por una reclamación de precios de la gasista argelina ha congelado el beneficio e, indirectamente, también puede repercutir en el consumidor por un alza en las materias primas.
Del análisis de las cuentas de Gas Natural Fenosa se desprende una notable evolución del negocio en América Latina, que ya supone el 24% del total de la compañía.