Jubilación a los 67 años, sí o sí

M. J. Alegre MADRID/BRUSELAS/COLPISA.

ECONOMÍA

El Gobierno aprobará la reforma de las pensiones por decreto si no logra convencer a otras fuerzas políticas

18 dic 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Zapatero sacará adelante la jubilación a los 67 años, con o sin el apoyo de otras fuerzas políticas distintas del PSOE, pero el sistema introducirá elementos «razonables» de flexibilidad, para tomar en cuenta los años cotizados por el trabajador o el carácter penoso de determinadas tareas. La aplicación será progresiva.

El presidente adelantó esta decisión en Bruselas, al término del Consejo Europeo, en una conferencia de prensa en la que se esforzó por lanzar otros mensajes importantes para combatir la ofensiva de los especuladores. Autonomías y ayuntamientos mantendrán los compromisos de reducir el déficit y frenar el endeudamiento, dijo, porque, en caso contrario, «se los haremos cumplir». Los procesos de concentración de las cajas, que pasarán de 45 a 17, estarán culminados el 24 de diciembre, y estas entidades volverán a desnudarse, en un nuevo ejercicio de transparencia informativa, detallando sus activos deteriorados a finales de año.

Mientras la subcomisión parlamentaria del Pacto de Toledo para la reforma de las pensiones ultima su informe, y ya tiene decidido no concretar en ese texto la edad de jubilación, porque los grupos se reconocen incapaces de alcanzar un acuerdo en ese punto, el jefe del Ejecutivo está decidido a que el proyecto que aprobará el Consejo de Ministros el viernes 28 de enero prolongue la edad laboral desde los actuales 65 hasta los 67 años.

Argumentó Zapatero que esa medida es imprescindible para garantizar las pensiones de quienes ahora tienen entre 40 y 50 años, en su mayoría nacidos en la etapa de la explosión demográfica del baby boom , y de los inmigrantes llegados en el primer lustro de este siglo. Si ahora se adopta esta reforma, advirtió, se podrá hacer con progresividad, mientras que los cambios tendrían que ser más radicales si se dejaran para el futuro. Por eso se declaró dispuesto a aprobarla incluso sin aliados.

«La reforma de las pensiones es clave para la estabilidad fiscal», desveló, dejando claro que su aprobación también forma parte de la batería de propuestas con las que se intenta apaciguar a los mercados y convencer a analistas y agencias de calificación. Los expertos realizan cálculos muy variados, pero el consenso se decanta por estimar que, por cada año de aplazamiento de la edad de jubilación, el ahorro podría ser equivalente a medio punto de PIB.

Momento histórico

Para refrendar su decisión, Zapatero lanzó un reto a la oposición y añadió que este trascendental cambio «no puede estar pendiente de las expectativas de unas u otras elecciones». «Estamos en un momento histórico, como ha habido otros, en los que España se juega la confianza, la prosperidad y el empleo», aseveró. Por eso expresó su convicción de que si el Gobierno explica bien los datos y las medidas, «la mayoría de la población entenderá la reforma, porque sabe lo que se juega». Tras recordar que países punteros como Alemania ya hicieron su reforma en los noventa, o en la primera década de este siglo, confesó: «También en España tendríamos que haber hecho otras cosas en esos años».

Objetivo principal de la reforma de las pensiones es conseguir que la edad media efectiva de retiro de los trabajadores españoles vaya más allá de los actuales 62,6 años. «A largo plazo, hará que la situación no sea sostenible», declaró Zapatero. «Si ahora trazamos una hoja de ruta -añadió- los sacrificios actuales garantizarán la solvencia futura».

El Gobierno se plantea la extensión de la vida laboral de forma progresiva y flexible. De partida, el Ejecutivo estima que sería adecuada la entrada en vigor en el 2013. Los trabajadores que en ese año cumplen los 65 verían prorrogada la permanencia en el puesto de trabajo dos meses; para quienes alcancen esa edad en el 2014, serían cuatro meses, seis en el 2015, ocho en el 2016 y así sucesivamente hasta el 2025, ejercicio en el que la edad de retiro legal sería a los 67 años.

Las otras variables con las que jugará la prolongación de la edad de jubilación son el número de años cotizados y las características del trabajo desempeñado, porque no es lo mismo realizar faenas de gran esfuerzo físico que cumplir la jornada laboral en una oficina.