El Gobierno opta por privatizar el control aéreo en algunos aeropuertos pequeños

Julio Díaz de Alda MADRID/COLPISA.

ECONOMÍA

El personal de Aena que sea sustituido recibirá ofertas de traslado a otros aeródromos españoles

23 jul 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

El Consejo de Ministros aprobará hoy un decreto del Ministerio de Fomento que abre la puerta a la privatización de las torres de control. En concreto, una norma que establece los criterios y requisitos para la certificación del nuevo personal de servicios de navegación aérea.

Con este paso, el Ejecutivo abre a la competencia las torres de control, a las que podrán llegar operadores españoles o extranjeros para desempeñar las labores que hoy realiza Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena). Lo harán, claro, a un precio inferior al de la empresa pública, y nunca en centros de control, más complejos y estratégicos y que se reservan siempre para la autoridad nacional.

El nuevo escenario es una nueva vuelta de tuerca en la pelea que mantiene Fomento con los controladores aéreos, que ven cómo en breve aterrizarán en sus torres compañeros más baratos. El personal de Aena que sea sustituido recibirá de su empresa una oferta de traslado a otro lugar de España. En caso de no aceptar, serán despedidos tras su pertinente indemnización. La medida servirá también para rebajar los costes de Aena, que tiene en marcha un intenso plan con que el que pretende ahorrar 750 millones de euros entre el 2010 y el 2013.

Fuentes del sector ven más probable que los primeros contratos, que se licitarán en octubre para empezar a funcionar en diciembre, los consigan empresas españolas, aunque la legislación europea permite que cualquier proveedor certificado en un Estado pueda dar su servicio en cualquier otro país de la UE. Y es que resulta complicado para una británica, por ejemplo, tener solo a uno o dos controladores en España. El proceso se iniciará en los aeropuertos más pequeños para extenderse después al resto, aunque los más grandes como Madrid o Barcelona se reservarán para Aena.

Normalidad en El Prat

Ayer, mientras el aeropuerto barcelonés de El Prat (uno de los más afectados por la huelga de controladores en Francia y las bajas en su plantilla) recobraba la normalidad al cubrirse las ausencias de ocho controladores aéreos con trabajadores externos -informa Efe-, el ministro de Fomento, José Blanco, explicaba ante una comisión parlamentaria cómo se deberán prestar los servicios de tránsito aéreo en el futuro. Una vez que se apruebe el decreto, se va a convocar un concurso (en septiembre) para los nuevos proveedores, y se confía en que puedan entrar a desempeñar sus funciones antes de fin de año.

En la comparecencia de Blanco, hubo un tenso diálogo entre el ministro y el diputado de IU, Gaspar Llamazares, quien acusó al titular de Fomento de actuar manu militari con los controladores españoles. Llamazares dijo que no es contrario a la abolición de los privilegios, pero que actuar a través de un decreto «da miedo». Respecto a la posibilidad de encargar el control aéreo a militares, también criticada por Llamazares, el ministro insistió en que lo importante es que si hay alguien que no cumpla su función, se puedan suplir para garantizar un servicio público.