Caixanova y Caixa Galicia calculan que su fusión costará 628 millones

MIguel Á. Rodríguez REDACCIÓN/LA VOZ.

ECONOMÍA

Cerca de 200 oficinas cerrarán antes del 2013 y las prejubilaciones afectarán al menos a un millar de empleados

08 jun 2010 . Actualizado a las 09:21 h.

Los 16 equipos de trabajo constituidos por Caixa Galicia y Caixanova para diseñar el plan de negocio de la fusión gallega calculan que el coste de la integración (cierre de oficinas y prejubilaciones) rondará los 628 millones de euros, lo que significa 143 millones más que el precio estimado por la consultora KPMG, contratada por la Xunta en diciembre para analizar esta alianza.

Aunque el número de sucursales afectadas y el de prejubilaciones necesarias se despejará definitivamente en dos días, las estimaciones de las últimas semanas apuntan a que al final serán algo más de 200 las oficinas que deberán cerrar (por duplicidad o resultados de negocio) y que bastaría con adelantar la jubilación a 990 trabajadores. KPMG había calculado el cierre de 280 oficinas y la prejubilación de 1.296 personas. El adelgazamiento se iría completando entre los años 2010 y 2013.

El plan de desinversiones es prácticamente idéntico al calculado por KPMG y rondará los 12.000 millones de euros. Como parte de este paquete, está sobre la mesa la posible venta de parte de la red de oficinas (todas situadas fuera de Galicia). Esta operación afectaría a cerca de 235 sucursales, pero no serían vendidas de inmediato.

Los grupos de debate han trabajado con tres posibles escenarios y optado al final por uno. Las dos consultoras que participan en el proceso (PriceWaterhouse y Deloitte) sometieron ese plan de negocio a un estrés máximo de mercado para comprobar la fortaleza de la nueva caja. El resultado tras aplicar una elevación de la morosidad y una depreciación de activos es satisfactorio.

La entidad fusionada daría beneficio neto desde el primer año de vida. Y sus coeficientes de solvencia serían mejores que los peores mostrados ahora mismo por cualquiera de las dos cajas. La auditora KPMG había previsto 2.671 millones de ganancias hasta el año 2015, con unas sinergias derivadas de la integración estimadas en 120 millones de euros.

Caixanova y Caixa Galicia consideran que las pérdidas esperadas (por devaluación de sus activos y aumento de la morosidad) pueden llegar hasta los 5.000 millones de euros.

Está igualmente previsto un ajuste de las 30 sucursales de Caixanova y Caixa Galicia abiertas ahora mismo en 11 países de Europa y América. Pero la intención de ambas es aumentar la presencia exterior de la nueva entidad, que nace ya como la más internacionalizada de España, por delante de La Caixa, Caja Madrid o la BBK.

Obra social y dotaciones

Las previsiones mejoran las expectativas de KPMG para la obra social. La consultora que contrató la Xunta hablaba de destinar 300 millones en cinco años a este capítulo y las cajas esperan mejorarlo al menos en un 6%. Aunque muy analizadas, todas las cifras tienen un carácter de provisionalidad hasta que las cúpulas de Caixa Galicia y Caixanova les den el visto bueno definitivo, algo que ocurrirá entre hoy y mañana.

En el plan de integración que se trasladará al Banco de España en los próximos días se incluirán dotaciones para provisiones superiores a las máximas fijadas por el organismo supervisor. La intención es que ningún posible endurecimiento de las condiciones por riesgo o aumento de morosidad pueda poner en peligro la viabilidad de la caja, que quedaría consolidada en el sexto puesto del ránking nacional, con un volumen de activos cercano a los 78.000 millones de euros.