Los beneficios se destinarán a reforzar la solvencia de la entidad, que aún participa en otras 131 compañías
25 feb 2010 . Actualizado a las 15:48 h.Caixa Galicia, a través de su brazo industrial, cerró en la madrugada de ayer la venta de su participación en la sociedad portuguesa Investimentos Ibéricos, o, lo que es lo mismo, de la parte indirecta que le quedaba en la petrolera Galp a través de esa sociedad. La entidad financiera se desprende de ese trozo de su tarta industrial a cambio de 176,8 millones de euros, 156,8 de plusvalías. Es la operación más rentable en la historia de Corporación Caixa Galicia: en el 2006 se hizo con esa participación por 20 millones de euros y acaba de ganar casi ocho veces más en cuatro años.
El empresario portugués Américo Amorim se ha quedado con esa participación de Caixa Galicia. En la práctica, no cambia el accionariado de Galp porque Amorim y Caixa Galicia participaban juntos (55% para el empresario, 45% para la caja) en la petrolera a través de la sociedad Investimentos Ibéricos. Ahora, el potentado industrial se queda como accionista único de esa firma de inversiones y mantiene el 33,24% de Galp, en la que participa también a través de su sociedad Amorim Energia.
De esta forma, Caixa Galicia sale del mercado industrial portugués, donde -aparte de una docena de oficinas- solo mantiene la parte que le corresponde por las inversiones de Pescanova en el país vecino (tutela el 20% de la multinacional pesquera).
Esos casi 157 millones de beneficio de la operación le servirán a la caja para reforzar su solvencia y aumentar su hucha de provisiones ante el complejo 2010 para el sector financiero. Corporación Caixa Galicia cuenta 490 millones de euros de liquidez para afrontar posibles proyectos futuros si se presenta alguna oportunidad. En todo caso, no se descartan operaciones similares por parte de la caja que dirige José Luis Méndez, si bien en la cartera de desinversiones Galp era una de las que figuraban en los primeros lugares y se estaba negociando de forma intensa en los últimos días.
Casi 290 millones en total
Caixa Galicia entró en Galp en el 2006 dentro de su política de apuesta por el sector energético. Lo hizo aprovechando la venta de su participación (un 9,95%) en el Banco Pastor, una desinversión que le reportó 129 millones de euros de plusvalías. En la petrolera portuguesa llegó a controlar hasta un 7,5%, entre control directo e indirecto (este último, el desprendido ayer). La primera venta de su paquete en Galp la realizó en el 2007, ganando 132 millones de euros. Así, esa empresa portuguesa le ha reportado a la entidad casi 290 millones de euros en plusvalías en cuatro ejercicios.
Pese a su marcha de Galp, el brazo industrial de Caixa Galicia mantiene una importante bolsa inversora en el sector energético, a través de Gas Galicia, Reganosa y Norvento principalmente. En total, la corporación es accionista de 131 compañías -repartidas por 20 sectores diferentes- que emplean a casi 57.000 personas y que, con los datos provisionales del 2009, acabaron el año con un beneficio neto de 1.254 millones de euros. Una de las últimas firmas en las que entró la caja fue Itínere, en verano. Es la compañía que controla las principales vías de pago de la comunidad.