La Xunta se opondrá a que cajas de fuera se hagan con las gallegas

ECONOMÍA

El PPdG recuerda que las cajas no son bancos comerciales, sino que tienen un fin social que no se debe obviar

05 jul 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

La Xunta podría seguir los pasos de Andalucía, Cataluña y Extremadura a la hora de plantear si el nuevo Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) aprobado la semana pasada por el Consejo de Ministros afecta negativamente a los intereses de Galicia e invade competencias autonómicas, al dejar abierta la posibilidad de que el Banco de España tenga la última palabra en las fusiones de cajas de ahorros de diferentes comunidades, y se elimine así la capacidad de veto de los Gobiernos autonómicos.

Según este decreto, que deberá ser ratificado en el Congreso de los Diputados el próximo miércoles, el antiguo instituto emisor tendrá la autoridad de decidir con quién casa a una entidad que haya sido intervenida, y a los Gobiernos autonómicos de las cajas afectadas en la operación solo les quedará la posibilidad de emitir un informe al respecto. Hasta ahora, las comunidades tenían capacidad de veto en cualquier fusión.

Tanto en el Ejecutivo que dirige Núñez Feijoo como en el grupo parlamentario popular son muy cautos, y no desean abrir un nuevo frente justo cuando se está negociando con Madrid la financiación autonómica. No obstante, fuentes de la Consellería de Facenda explican que la Xunta «siempre defenderá los intereses de Galicia, con entidades financieras propias y saneadas».

Desde la aprobación del FROB, varias comunidades han iniciado movimientos para posicionarse en el nuevo escenario. Cataluña y Andalucía juegan a dos bandas: por una parte, han anunciado que estudian si jurídicamente se puede plantear un conflicto de competencias. Pero al tiempo han comenzado los movimientos para llegar al FROB con los deberes hechos, para que sus cajas pequeñas no sean absorbidas por entidades foráneas. Así, Caixa Sabadell, Caixa Terrassa y Caixa Manlleu ya han acudido al Banco de España para plantear una posible integración, mientras que Caixa Catalunya, Girona y Tarragona han admitido negociaciones para fusionarse. Esta última operación daría lugar a la cuarta caja española, relegando a Caixa Galicia al séptimo puesto del ránking. En Andalucía, la Junta ha dado el visto bueno para que Unicaja absorba a Cajasur (cortejada por Caja Murcia), y busca pareja para Cajasol. También hay movimientos en Castilla y León (Caja España y Caja Duero), País Vasco y Extremadura.

En Galicia aún no ha habido un posicionamiento político claro. Según Facenda, en este momento las posibles fusiones que puedan afectar a Caixa Galicia y Caixanova «no están sobre la mesa». El departamento que dirige Marta Fernández Currás considera que el FROB es un instrumento «positivo, siempre y cuando suponga un refuerzo de la solvencia de las entidades y la estabilidad del sistema financiero» y «respete las competencias de las autonomías». No obstante, la Xunta estima que no se debe hacer una valoración definitiva hasta que no termine su tramitación.

Replantear la dimensión

El portavoz de Economía del PPdG, Pedro Puy Fraga, adelanta por su parte que el Gobierno gallego no vería con buenos ojos posibles fusiones con entidades foráneas. Puy Fraga admite que se «debe replantear si la dimensión de las cajas es la correcta en el momento de crisis actual», y estima que en este debate «deben salvaguardarse los intereses de los consumidores de servicios financieros, con criterios de eficiencia económica», pero también recuerda que las cajas «no son bancos comerciales, sino entidades que tienen la función de canalizar el ahorro de los ciudadanos en unos fines sociales que no se pueden obviar». Por eso, estima que «la prioridad de la Xunta será mantener las competencias sobre las cajas». En cualquier caso, adelanta, «la opción de buscar fusiones con entidades de fuera será la última de la lista para el Gobierno gallego». En su opinión, la creación del FROB no debe de ser interpretada como una barra libre para hacer operaciones interregionales: «No está concebido para eso, sino para cuando surja la necesidad de una intervención por parte del ?Banco de España».