Trichet pide a España una reforma laboral que abarate el despido

Natalia Bore

ECONOMÍA

Sugiere que se moderen los salarios y cree que el sistema de protección social es excesivamente caro para las empresas

23 jun 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet, aprovechó su paso por Madrid, donde participó en una conferencia organizada por el Foro Nueva Economía, para lanzar su enésima advertencia al Gobierno sobre la necesidad de acometer una reforma del mercado laboral. Entre las deficiencias que Trichet considera que deben solucionarse está, por ejemplo, un sistema de protección a los trabajadores que, a su juicio, es «excesivamente oneroso para los empresarios».

Aunque afirmó que «no pretendía asustar a nadie», el presidente del BCE, apostó por hacer más «flexible» y «más dinámico» el mercado de trabajo en España. Y sobre la impopular medida de abaratar el despido, apuntó que «la idea sería buena y habría que analizarla».

Trichet cerró filas con los argumentos que en su día abanderó -con el consiguiente enfrentamiento abierto con miembros del Ejecutivo, como el ministro Corbacho- el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, quien también defendió la necesidad de esa reforma. «Estoy totalmente de acuerdo-aseveró Trichet- sería un error no seguir sus indicaciones», dijo, en una frase de apoyo que el propio Fernández Ordóñez agradeció pidiendo un brindis «por la eurozona y el señor Trichet».

Pero la arenga de reformas lanzada por el banquero francés fue aún más extensa, ya que pidió el fin de las cláusulas de revisión salarial, por las que se actualizan los salarios según la evolución de la inflación. Trichet, que considera «un problema, no a corto, pero sí a largo plazo» vincular los sueldos al IPC, abogó también por la moderación salarial y la negociación colectiva realizada a nivel de empresa.

Sobre la política monetaria del BCE, el presidente reiteró que el precio del dinero, en el 1%, es «el adecuado» para la eurozona, al tiempo que le recordó al Gobierno español que ya no tiene margen de endeudamiento por haber ido «muy lejos» en él. De ahí la recomendación de Trichet de acometer reformas estructurales para regresar a «la senda de una situación sostenible».