Las petroleras siguen subiendo la gasolina tras aplicar el alza de impuestos

ECONOMÍA

El litro de 95 octanos se vendía ayer a 1,13 euros, ocho céntimos más caro que hace siete días

19 jun 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

La estabilidad en el precio de los carburantes ha durado apenas unos meses. La subida de impuestos anunciada por el Gobierno hace siete días para aumentar la recaudación por la crisis -que entró en vigor la semana pasada- ha supuesto por sí sola un encarecimiento de 2,9 céntimos en el precio de venta del litro de gasolinas y gasóleos. Pero las petroleras -Repsol y Cepsa a la cabeza- han aprovechado el nuevo escenario fiscal para aplicar un incremento muy superior; hace una semana, el carburante de 95 octanos se comercializaba en los surtidores a 1,05 euros, mientras que ayer estaba ya a 1,13 en gran parte de las estaciones de servicio; es decir, en solo siete días el litro ha subido 0,08 euros: a los 2,9 céntimos del Gobierno habría que sumar los 5,1 aplicados por las petroleras. En el caso del gasoil, la subida ha sido de seis céntimos: de 0,92 a 0,98.

Fuentes consultadas en el sector petrolero consideran que los fuertes encarecimientos de los últimos días obedecen al funcionamiento del mercado internacional, en el que Estados Unidos -al igual que sucede todos los veranos - está tirando con intensidad de la demanda de gasolinas para satisfacer las necesidades aparejadas a los millones de desplazamientos que se producen en el país en los meses estivales.

«A diferencia de lo que ocurre en Europa, en Norteamérica casi todos los coches son de gasolina; no hay diésel», explican fuentes del sector. Sin embargo, las pequeñas estaciones de servicio, que funcionan al margen de Repsol y Cepsa, advierten de que no existen razones de mercado que justifiquen unos encarecimientos tan brutales. «Nosotros somos deficitarios en diésel y ahí sí que es más normal que se produzcan más tensiones inflacionistas en los precios de España, pero exportamos gasolinas, nos sobran gasolinas; alguien nos tendrá que explicar por qué se está comercializando a estos precios», sostiene Casto Bravo, de la Confederación Española de Estaciones de Servicio (Cees).

Las organizaciones de usuarios advierten de que el encarecimiento del crudo no justifica en modo alguno la hiperinflación de los combustibles en la última semana y denuncian que se trata de una práctica que se repite año tras año, consistente en alegar razones de mercado para colocar los carburantes en máximos a las puertas de los masivos desplazamientos de la operación salida de verano.

Curva ascendente

Los datos sobre los precios en gasolineras divulgados por el Ministerio de Industria -actualizados ayer- muestran que, desde el pasado enero, el carburante de 95 octanos se ha encarecido en Galicia en 26 céntimos el litro, lo que supone casi un 30%. En el caso del gasoil de automoción la subida ha sido de un 12,6% y el litro está a solo dos céntimos de situarse en el euro, barrera psicológica que superó, por vez primera, en septiembre del 2007.

La inflación de las gasolinas castiga con especial dureza los presupuestos de los hogares gallegos. Los datos muestran que los salarios, por término medio, son un 15% inferiores a los de España, pero el precio de los carburantes, en cambio, es más alto. Los litros de gasolina y de diésel son 0,02 euros más caros que en el conjunto del país, como consecuencia del céntimo sanitario. A esto se suma la nula competencia, en un mercado dominado por Repsol y Cepsa.