El proyecto de creación de la plataforma de aviones no tripulados, cuyo plan de viabilidad está en fase de estudio en los despachos de la Consellería de Industria, se complementa con la construcción de un helipuerto que, según consta en el documento, tendrá capacidad para generar 700 puestos de trabajo.
La misión de esta base de helicópteros, la mayor de las existentes en España, será centralizar todas las aeronaves que se encuentran operativas en la comunidad gallega para las funciones de salvamento y rescate.
Las instalaciones dispondrán de hangares en los que los equipos humanos especializados se encargarán de las labores de mantenimiento, trabajos que actualmente están adjudicados a la firma Inaer.
Esta infraestructura completará el macroproyecto aeronáutico de Ourense, situado concretamente entre Trasmiras y Sarreus. Según el plan de viabilidad, las actividades que se llevarán a cabo en esta base se pueden agrupar principalmente en dos grandes capítulos: por un lado, misiones reales, tanto militares como de reconocimiento y observación; y por otro, experimentos y ensayos en vuelo con prototipos no tripulados.
El documento explica que el objetivo fundamental del futuro aeródromo es el establecimiento de una base de operaciones en la que llevar a cabo las pruebas necesarias para el desarrollo del programa de trabajo, en lo que se refiere a la experimentación con vehículos no tripulados, así como disponer de un enclave estratégico desde el que poder realizar las misiones reales previstas.
El futuro aeródromo, dotado con una pista de despegue y aterrizaje de 5 kilómetros de largo, se concibe en el proyecto como una base de ensayos y experimentación para nuevas aeronaves de distinta índole, entre las que se encuentran prototipos propulsados por motores eléctricos que se alimentan mediante células fotovoltaicas.
Una característica común de este tipo de aparatos es, según afirma el plan presentado, la de disponer de una gran envergadura que permita incrementar su coeficiente de planeo, debido a que los motores eléctricos de bajo consumo no aportan, al menos de momento, grandes potencias.
Ventaja
«El disponer de una gran autonomía hace a estas aeronaves idóneas para la vigilancia desde gran altura, y su reducida velocidad no supone una desventaja en este caso, si no más bien una ventaja, ya que se mejora la capacidad de observación de objetivos estratégicos», explican los redactores del estudio.
El complejo aeronáutico dispone de una plataforma de estacionamiento que ha sido diseñada para poder albergar ocho aeronaves simultáneamente.
Fuentes vinculadas al proyecto explican que se trata de una base aeronáutica eminentemente industrial, cuyo principal usuario será un gran grupo empresarial integrado por constructores aeronáuticos como EADS, Northrop Grumman o Boeing que desarrollan programas militares, lo que además da entrada a la participación militar y a la propia NASA.
El suelo correría por cuenta de las Administraciones locales y la superficie a utilizar será explotada en régimen de alquiler por un período inicial de 50 años.
Dura competencia
¿Pueden los andaluces o los madrileños competir con la macroinfraestructura planificada para la comunidad gallega? Sobre el papel no, pero sobre el terreno, Andalucía lleva ya mucho camino de ventaja. Además del proyecto de El Arenosillo, en donde quieren levantar el gran complejo que rivaliza con el gallego, la industria andaluza cuenta desde el pasado mes de marzo con unas instalaciones en Jaén, un espacio aéreo temporalmente segregado del tráfico, donde se realizarán vuelos experimentales de los distintos sistemas y subsistemas de UAV, así como ejercicios relacionados con las nuevas tecnologías con las que se gestionará el movimiento de aeronaves.
Estas instalaciones comenzarán a funcionar a partir del próximo mes de septiembre con una campaña de ensayos de verificación de varios sistemas de aviones no tripulados y diversos vuelos para la formación de pilotos y operadores de este tipo de aeronaves.