La comisión tiene dos días para analizar los proyectos

La Voz

ECONOMÍA

14 dic 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Lo que originalmente se planteó como la ordenación definitiva del sector eólico gallego se ha convertido en un proceso tortuoso, con muchas incógnitas y que podría concluir en un calvario judicial.

La comisión podría ver solo los anteproyectos ganadores

La comisión de evaluación de las candidaturas está formada por siete representantes de Industria, uno de Medio Ambiente, otro de Política Territorial y otro de Medio Rural. Los proyectos solo están siendo analizados por tres miembros de Industria. El resto aún no ha visto la documentación y se da por hecho que solo tendrán la oportunidad de votar una resolución con los anteproyectos ganadores. Fernando Blanco deberá firmar la orden de resolución como muy tarde el miércoles. La comisión tendría así dos días hábiles para analizar los proyectos. Según fuentes próximas a la misma, solo hay una reunión prevista para el martes.

Los nuevos parques podrían ser admitidos sin plan eólico

La consellería ya tiene en su poder un borrador del plan sectorial que legalizará las zonas en las que se implantarán parte de los nuevos molinos. Ese documento no entrará en vigor antes de 18 meses, por lo que los nuevos parques podrían ser admitidos con el plan vigente. Los promotores ya han anunciado que recurrirán el concurso si esto es así. Además, la ausencia del nuevo plan eólico ha sido contestada desde dentro del bipartito. Medio Ambiente ya ha dicho que controlará cada megavatio para que cumpla todas las garantías.

Dudas sobre algunos aspirantes al concurso

La modificación de las reglas del juego, iniciada hace ya casi dos años, ha coincidido con una gran crisis económica que ha ido cambiando sobre la marcha la realidad del sector. A la puja concurren decenas de empresarios que atraviesan graves dificultades económicas. El concurso exige que los aspirantes demuestren solvencia para afrontar los proyectos, pero para ello han tenido que enviar las cuentas de hace un año. La realidad ha cambiado mucho desde entonces. En la lista hay firmas en suspensión de pagos (Martinsa o Alcuba) y otras que negocian con los bancos para evitarlo (San José).

En el sector existe el temor de que se aproveche el reparto de molinos para salvar de la ruina a determinadas sociedades. Constructora San José, por ejemplo, le ha adelantado a sus bancos acreedores que resultará beneficiado en la puja.