Un «stock» de 700.000 coches ahoga Citroën

ECONOMÍA

El fabricante necesita sacrificar producción en sus seis mayores plantas de Europa, que apenas trabajarán en diciembre

16 nov 2008 . Actualizado a las 02:33 h.

Casi 700.000 coches a la espera de comprador. Esta es la poderosa razón que explica la práctica paralización de las fabricas de PSA Peugeot Citroën hasta que arranque el 2009. Los ajustes de producción que el grupo ha venido aplicando desde septiembre pasado en sus principales plantas no han podido evitar que el stock siga engordando mes a mes, hasta ser un 20% más elevado que un año antes (566.000 unidades en almacén).

El actual volumen de existencias, además de ralentizar los ingresos en caja, dispara los costes fijos a los que debe hacer frente el fabricante de automóviles. Para afrontarlos, PSA (y también Renault) ha optado por tomar medidas que aligeren el stock, y la principal ha sido reducir su producción para volver a un nivel de reservas similar al de finales del 2007.

Además de prepararse para encarar un 2009 que arranca con el pronóstico del mercado en contra, la estrategia diseñada por la multinacional le permitirá mantener los costes bajos, sin penalizar la red de distribución.

El hecho de suspender la producción también permite a los fabricantes no poner ningún peso en la economía de su red de distribución. «Podríamos descargar el coste de los vehículos producidos en la red de distribución, pero es preferible mantener una base financiera tan sana como sea posible», afirma un portavoz del grupo al periódico especializado L'Usine Nouvell . Y lo explica de este modo: «La mano de obra es solo el 10% del coste de producción de un vehículo, frente al 60% de las materias primas y el 30% restante, que suponen energía, transporte y logística. A veces es más rentable poner fin a la producción, aunque durante ese tiempo los empleados reciban el 100% del salario».?

Eventualidad cero

Según esta política de gestión de crisis diseñada por PSA, las plantas más productivas del grupo son las que se están viendo obligadas de reducir actividad, medida que, en todos los casos, está acompañada de una supresión de puestos de trabajo. Las fábricas francesas de Poissy, Rennes, Mulhouse y Sochaux; las españolas de Madrid y Vigo, y la eslovaca de Trnava son las más afectadas por los ajustes. Solo en Francia, el grupo ha suprimido 2.000 empleos temporales desde septiembre y ha avanzado el objetivo de alcanzar la eventualidad cero.

El pasado jueves, cuando la dirección de PSA en Vigo comunicaba la supresión de la mitad del turno de noche -que conlleva la eliminación de 800 contratos-, la cúpula de París anunciaba que la planta de Rennes (8.200 trabajadores) no fabricará ningún vehículo en diciembre, mes en el que parará la producción de los modelos Peugeot 407, Citroën C5, Xsara Picasso y C6.

En Mulhouse (6.021 trabajadores), que en octubre ya suprimió el turno de noche, fabricará el último coche el 12 de diciembre y, hasta entonces, habrá parado máquinas un total de 18 días en los que no saldrá ningún Peugeot 308, 206, ni Citroën C4.? La inactividad hasta que arranque el 2009 también salpica a China, donde PSA acaba de comunicar la destrucción de mil empleos por la caída de la demanda local. La falta de visibilidad para el 2009 justifica, según el fabricante, las drásticas medidas adoptadas y que, en el caso de Vigo, ha supuesto ya la supresión ya de 1.230 empleos (330, de los turnos de día, más 800 que se dejarán de cubrir en el de noche a partir de enero).