Endesa analiza en estos momentos la posibilidad de solicitar al Ministerio de Industria la autorización para construir el nuevo gasoducto gallego, incluido en la planificación energética para el período 2008-2016 y aprobada en el último Consejo de Ministros. La compañía eléctrica confirma que está muy interesada en esta infraestructura, aunque por ahora aún no ha tomado la decisión de pedir permiso para ejecutarla. De ser así, entraría en pugna directa con Enagás por su construcción, ya que el gestor técnico del sistema ya ha solicitado autorización al responsable de Industria, Miguel Sebastián.
Fuentes del gestor técnico del sistema aseguraron que había solicitado al gabinete que dirige Miguel Sebastián la adjudicación directa de toda la conexión, desde Guitiriz hasta Algete.
Además de los planes gasísticos de Endesa en Galicia - 17 proyectos para la distribución de este combustible en la comunidad- la empresa cuenta con planes en Ponferrada, en donde tramita la construcción de una central de ciclo combinado de 850 megavatios de potencia, que será alimentada desde la planta de Reganosa -en la que Endesa tiene el 21% del capital- de la ría de Ferrol.
El nuevo gasoducto discurrirá por 550 kilómetros -unos 125 en territorio gallego- y costará 400 millones de euros. De acuerdo con el plan estatal, estará estructurado en cinco tramos: Guitiriz-Lugo; Lugo-Villafranca; Villafranca-Castropodame; Castropodame-Zamora y Zamora-Algete. Precisamente este tendido fue propuesto por Enagás, mientras que otro operador gasístico, Unión Fenosa, había planteado a Industria que el nuevo gasoducto de enlace con la Meseta discurriese por las provincias de Pontevedra y Ourense. La eléctrica gallego-madrileña también había solicitado que se incluyese en la planificación el desdoblamiento del actual gasoducto gallego (entre Tui y Llanera (Asturias), obra que no ha sido aprobada.
Unión Fenosa descarta entrar en la pugna por construir la nueva conexión gasística entre Galicia y Madrid.