El precio de la electricidad podría aumentar el valor de las concesiones un 25% en un año

La Voz

ECONOMÍA

24 jun 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

A estas alturas, pocos dudan de la rentabilidad de los parques eólicos. En Galicia no hay ninguno superior a los 50 megavatios, el límite impuesto por el Gobierno para acogerse al 100% de la prima que ofrece el Ministerio de Industria por impulsar esta energía renovable.

Solamente los 2.325 megavatios de nueva creación que la Xunta pretende adjudicar antes de final de año facturarán cada doce meses 490 millones de euros. En el 2013, la comunidad autónoma debería estar extrayendo del viento 6.500 megavatios o, lo que es lo mismo, casi 2.800 millones de euros.

Pero las cuentas cada vez son más jugosas. Porque el precio del megavatio cotiza al alza. Y cada vez más. Según los datos de la Comisión Nacional de la Energía, el pasado año el pull eléctrico español, donde se negocia periódicamente el precio de la electricidad, cerró el ejercicio con el megavatio eólico a 75 euros. A día de hoy se paga a 80. Y los pronósticos más conservadores lo sitúan en cien euros a final de año, si el alza del petróleo no lo dispara a límites todavía mayores.

Rentabilidad garantizada

En enero del 2009, la rentabilidad de cada megavatio vertido en la red eléctrica habrá subido como poco un 25% respecto al 2007. Y ni uno solo de los megavatios producidos a partir del viento caerá en saco roto. La ley obliga a comprar hasta el último que se extraiga en España.

En Galicia, con sus 2.800 horas de viento anuales, se producen ahora 6.500 gigavatios a la hora, equivalente a lo que consumirían más de cuatro millones de personas. A pleno rendimiento, los 6.500 megavatios eólicos que la Xunta proyecta tener operativos a partir del año 2013 permitirían abastecer a una población próxima a los 13 millones de personas.

Pese a ser una comunidad excedentaria, Galicia está obligada a importar casi el 83% de toda la energía que consume (sea esta electricidad, gas o carbón). La intención es que el plan eólico contribuya en buena medida a corregir esta tendencia. En cinco años, los molinos permitirán exprimirle al viento el 95% del consumo total de electricidad en Galicia.

La llamada del viento (el nuevo petróleo autonómico, como ya lo conocen en la Xunta) se ha escuchado en todo el mundo. Porque su rentabilidad parece más que garantizada y además es eterna. Se calcula que cerca de 200 empresas de varios continentes estarán representadas en el concurso.

Las propuestas multiplicarán por entre 20 y 30 la oferta de megavatios en liza. Casi la mitad de ellas provendrán de empresas gallegas. Y la intención de la Consellería de Industria es que una buena parte del pastel eólico se quede en manos gallegas.