Queixería Bama, una de las mayores de Galicia, sustituirá el gasoil de la caldera por etanol obtenido de la lactosa
17 abr 2008 . Actualizado a las 02:00 h.Queixería Bama, una de las mayores de Galicia y cuya sede se encuentra en el municipio coruñés de Touro, ha dado con una fórmula para producir energía con la misma materia prima que transforma para hacer sus productos: la leche. A través de un proyecto en el que participa la Universidade de A Coruña -el departamento de Bioloxía Celular e Molecular-y que cuenta con financiación de la Dirección Xeral de I+D de la Xunta, esta firma láctea ha descubierto un microorganismo que transforma una parte del suero de la leche (la lactosa) directamente a etanol; se trata de un proceso similar al que ya tiene en marcha Abengoa en su industria de Curtis, donde obtiene alcohol a través de los cereales.
El impulsor del proyecto y propietario de Queixería Bama, Benigno Pereira, explica que esta iniciativa estará plenamente concluida a finales del 2008 y que ahora se halla en una fase en la que se busca lograr una producción de etanol que mejore el rendimiento.
En unos meses, el abastecimiento energético de Queixería Bama ya no provendrá de una caldera de gasóleo, tal y como sucede ahora, sino de la combustión de etanol. Esto va a permitir que la empresa ahorre, aproximadamente, 800 litros de carburante diarios, lo que supone evitar un coste mensual que sobrepasa los 24.000 euros (más de 4 millones de las antiguas pesetas). El presupuesto total de este proyecto, incluida la investigación académica y la puesta en marcha de un nuevo proceso industrial para generar calor, asciende a los 200.000 euros. «Nós non temos ningún afán lucrativo nin intención de montar empresas nesta liña; imos, única e exclusivamente, a un aproveitamento da lactosa do soro que é para autoabastecemento, para mellorar a nosa eficiencia enerxética; iso non quere dicir que non patentemos as cousas que descubramos, pero si quero que quede clara a idea de que non temos intención de facer negocio», precisa Benigno Pereira, el dueño de una quesería con más de 30 empleados.
Además de la obtención de etanol, del suero de la leche pueden lograrse otras aplicaciones. La firma de Touro tiene otro proyecto en marcha para alcanzar mejores aprovechamientos. Según explica el empresario, el suero se compone de lactosa (que se usa para el etanol), grasa (para mantequilla) y la proteína. «Esta última é o que ten máis valor é un montón de utilidades para xerar novos alimentos funcionais».
Queixería Bama tiene otro proyecto con el departamento de Tecnoloxía dos Alimentos de la Universidade de Vigo -se encuentra en el campus de Ourense-para obtener productos de alto valor añadido en el que se utiliza esta proteína con aplicaciones especializadas. El control de la hipertensión arterial, la recuperación del peso y de la masa corporal o la mera fabricación de recubrimientos son algunos de los usos. «En Ourense estanse a facer as probas de sabor, pero todavía non podemos adiantar nada», explica Benigno Pereira. Y añade: «Temos máis adiantado a cuestión do etanol».
Bama va a generar biocombustible para su propio autoabastecimiento industrial, pero Galicia ha vivido en los últimos años una auténtica eclosión en esta materia. Firmas como Isolux o Acciona tienen en proyecto grandes plantas industriales para producir biocarburantes, pero la viabilidad de estas inversiones se encuentra amenazada por la importación masiva del producto desde EE.?UU. con subvención en origen. De hecho, las propias empresas han pedido al Gobierno central que elimine las ventajas fiscales existentes ahora en España para el biocombustible foráneo.