El aceite subió en un año un 33,7%, la leche, un 26%, y la harina, un 19%

M. J. Alegre

ECONOMÍA

03 ene 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Sin sorpresas. Los precios del pescado fresco, la carne de cordero y las gambas congeladas, productos típicamente navideños, se dispararon el pasado diciembre, de acuerdo con los datos del seguimiento que de los productos de alimentación realiza el Ministerio de Industria y Comercio. Las mayores alzas mensuales, que ya las habían sufrido los consumidores en sus bolsillos, las registraron la gamba congelada (10,9%), el gallo (7,34%), la lechuga (6,3%), la merluza (6,04%), la pescadilla (5,3%) y la chirla (4,46%). Las subidas no se concentraron en los artículos considerados de mayor lujo o propios de la gastronomía de la época: la sardina en aceite se encareció en diciembre el 5,37%, la harina de trigo el 4,6%, el aceite de girasol refinado el 3,6% y los espaguetis el 2,7%. Las rebajas fueron escasas. En plena temporada, las naranjas se abarataron el 9%.

Pero la escalada de los alimentos no es un efecto propio de las Navidades. Que la cesta de la compra se ha puesto imposible lo prueba la evolución de los precios en los últimos doce meses. El aceite de girasol refinado (el de mayor consumo familiar, junto al de oliva) está un 33,7% más caro; la leche ha subido el 25,8% en un año y la harina de trigo el 19%. Otros artículos envasados no les van a la zaga: la gamba congelada cuesta el 13,9% más, y los espaguetis han subido el 13,72% en un año.

Entre los productos frescos, la cebolla está un 20,2% más cara, la carne de pollo fresca registra un aumento del 16,3%, el limón ha subido el 14,35%, el pimiento verde un 13% y la anchoa el 11,8%. En este marco se explica la recomendación de las autoridades de Agricultura que aconsejaron sustituir la carne de pollo por la de conejo de granja, porque esta última se ha abaratado el 4% en los últimos doce meses. Otros alimentos frescos que han bajado de precio en el último año son el cordero pascual (-2,57%), la bacaladilla (que ahora cuesta el 2,48% menos) y la trucha (rebaja interanual del 2,3%). El descenso más destacado lo presenta, el aceite de oliva de acidez inferior a 0,4 grados., que vale un 17,2% menos.