El colectivo solo mantiene en el monte un garañón por cada manada de yeguas
01 ago 2010 . Actualizado a las 02:00 h.La tradición necesita echar mano a veces de las nuevas tecnologías para poder perpetuarse. Lo están notando mejor que nadie los organizadores de la Rapa das Bestas de Sabucedo, que por primera vez en su historia han tenido que recurrir a Internet para tratar de mantener el viejo sistema de gestión del ganado caballar que protagoniza la célebre fiesta.
Cada mes de julio, la concentración en la parroquia del ganado que durante todo el año vive en libertad en los montes de la zona no solo se aprovecha para cortar las crines de los animales. Además, los caballos se sanean y los nuevos potros se separan de los ejemplares adultos para marcarlos y para decidir su futuro. Las crías hembras se devuelven al monte para que continúen engrosando las manadas. Los potros machos se seleccionan. Solo los que presentan síntomas de buena salud, fortaleza y dotes de liderazgo se devuelven al monte para que se conviertan en garañones, los jefes masculinos de las manadas. Históricamente, por razones de operatividad, solo se permite que haya un macho por cada cuarenta, cincuenta o sesenta bestas . De otra forma, los grupos se atomizan y la supervivencia diaria en el monte se complica.
Para evitarlo, los potros no seleccionados como garañones se venden. Tradicionalmente, los tratantes de ganado acuden a Sabucedo tras la Rapa para pujar por estos animales. Sin embargo, la crisis en el sector reduce drásticamente la demanda y hace caer los precios.
Este año, un mes después de la Rapa, el colectivo organizador no ha logrado vender ni uno solo de los 18 potrillos entresacados de las manadas. Tienen en torno a un año de vida y permanecen en un cierre en la zona de O Castelo (Sabucedo), a la espera de que alguien dé un duro por ellos. En los últimos años, la venta tampoco había sido fácil. Los tratantes no quieren pagar más de 60 o 70 euros por animal. La asociación Rapa das Bestas considera ridícula esta cantidad. Ha buscado mejores precios entre los tratantes portugueses, pero no ha habido suerte.
El colectivo se resiste a bajar más los precios, pero sabe que de una forma u otra, antes o después, tendrá que deshacerse de los potros. Su última idea ha sido probar suerte en Internet. eBay no permite la subasta de animales, pero Segunda mano sí. En la web www.rapadasbestas.es se habilitará un enlace a www.segundamano.es , donde los potrillos se ofertarán a entre 100 y 120 euros. Los precios son negociables según cada caso.