Otro de los aspectos en los que se advierte un notable cambio es en la maternidad. Y no solo por la edad. También se aprecian en la actividad de la madre, cada vez son más las que están trabajando en el momento de tener descendencia, así como en su estado civil, puesto que se incrementan las que no están casadas. Una de cada cuatro en el 2008 se encontraba en esta situación, al sumar 123 de las 478 vecinas que en ese año fueron madres. A principios de este siglo, en el 2000, el número de madres solteras apenas alcanzaba el 11%, representando 46 de las 409 mujeres que tuvieron un hijo. Por municipios, en el 2008, fue Dozón el único que no registró nacimientos de madres no casadas, aunque también hay que decir que solo ocho mujeres fueron madres. El mayor porcentaje de vecinas que tuvieron un hijo sin estar casadas se produjo en Lalín, seguido por A Estrada.
En la actividad de las madres también se puede apreciar la evolución en la última década, ya que ahora las que optan por la maternidad mientras tienen un puesto de trabajo triplican a las inactivas, cuando a mediados de los 90 la situación era muy diferente. Las mujeres que no tenían trabajo superaban a las que sí lo tenían en el momento de tener los hijos.
En cuanto a la edad, las cifras del IGE reflejan que cada vez hay más que tienen hijos superados los 30.