En el plazo aproximado de una semana, el equipo de balonmano pontevedrés Teucro tiene previsto un desplazamiento algo alejado de lo que viene a ser lo habitual durante la temporada deportiva. Y es que los jugadores tienen previsto acudir al centro penitenciario de A Lama con el objetivo de realizar un entrenamiento conjunto con los reclusos que forman parte del equipo de la prisión pontevedresa, indicaron ayer desde la Sociedad Deportiva Teucro.
De este modo, el balonmano se suma a otras disciplinas deportivas, como el fútbol o el fútbol sala, a la hora de promover actividades que contribuyan a la reinserción social de la población penitenciaria de A Lama.
En la actualidad, la prisión alberga a unos 1.900 internos de distinta clasificación, por lo que el deporte se ha convertido en una de las iniciativas más demandadas y que más difusión tienen entre las rejas del penal. Sin embargo, uno de los inconvenientes es que los reclusos «siempre juegan en casa», ironizó un componente de un club que ha disputado encuentros en el penal.