El escultor pontevedrés instaló ayer en el souto de García Sánchez las cinco piezas de los dos cubos de piedra, tras completar un laborioso proceso de restauración
30 may 2009 . Actualizado a las 02:00 h.Lalín acaba de recuperar la obra escultórica realizada por Sergio Portela para la carballeira de A Crespa, pero ya en su nuevo emplazamiento del souto de García Sánchez. El artista pontevedrés trabajó en la mañana de ayer en la instalación de las cinco piezas que, con motivo del traslado del conjunto escultórico a finales del pasado verano, habían sido retiradas para proceder a su restauración. Un proceso laborioso, como señalaba Portela al concluir la colocación de las figuras; a alguna de ellas le faltaban piezas, y las pintadas realizadas afeaban el conjunto: «As pezas que faltaban, como os dedos nalgún caso, tivéronse que fundir de novo en Madrid. Fixéronse de novo os moldes en cera, fundíronse, e incorporáronse ás esculturas. Para eliminar os grafitis, procedemos a quitar a pintura e a pátina, e completado este proceso, procedeuse a repatinar de novo as figuras».
El trabajo de eliminación de pintura y pátina se desarrolló con chorreo de arena, y junto con la incorporación de los elementos que habían sido destrozados en las distintas figuras, ha supuesto un laborioso trabajo, como señalaba ayer el escultor, que espera que Lalín pueda disfrutar ahora, durante mucho tiempo, de las figuras en su estado original.
Las tareas de restauración han sido sufragadas por Augas de Galicia, y han incluido a las cinco esculturas que desde ayer completan el conjunto pétreo instalado en García Sánchez. Son las cuatro figuras que rodean el pabellón de piedra denominado A casa dos fillos predilectos de Lalín: se trata de cuatro esculturas que representan una especie todavía pendiente de formarse, con el sufrimiento como un elemento presente en este conjunto, frente a la figura del interior del pabellón, que representa un estado de felicidad y calma: sin embargo, esta obra no ha sido instalada, ya que se encuentra en el museo lalinense.
La quinta figura que volvió a instalar Sergio Portela en Lalín es la situada en el interior del otro cubo pétreo, situado en la parte superior del souto, el denominado Oratorio.
El conjunto escultórico del que vuelve a disfrutar Lalín fue concebido conjuntamente por Sergio Portela y su padre, el arquitecto César Portela para la Carballeira de A Crespa, dentro del proyecto de la segunda fase del paseo del Pontiñas. La realización de las esculturas fue obra de Sergio, que admitía ayer su predilección por A Crespa para su obra; reiteraba que había sido pensada para la recogida carballeira lalinense, «que era un entorno máis uterino. Este novo emprazamento está máis á vista, demasiado cerca das estradas».
El emplazamiento del conjunto en García Sánchez se decidió el pasado año, tras barajar también como alternativas la fraga de Catasós y la carballeira de As Casianas, en el polígono Lalín 2000. El cambio fue motivado al restituir Medio Ambiente A Crespa a sus antiguos propietarios, cumpliendo sentencia judicial. Habrá que esperar que los actos vandálicos no vuelvan a destrozar un conjunto escultórico público: esto es, de todos. El gobierno local había apelado, al realizar el traslado, a la colaboración ciudadana para evitar nuevos daños a las figuras.