Bloqueo mental en Balaídos

Xosé Ramón Castro
x. r. castro VIGO / LA VOZ

DEPORTES

Nervios, falta de atrevimiento y un perfil de plantel inmaduro, claves del desastre del Celta en casa

11 oct 2011 . Actualizado a las 11:23 h.

No es cuestión de falta de fútbol. Los males del Celta en Balaídos, en donde solo ha ganado uno de últimos doce partidos disputados, tienen otra explicación para los analistas consultados por La Voz. En lo deportivo la precipitación y los nervios de querer resolver por la vía rápida y la falta de desinhibición para atreverse con su mejor fútbol y en lo psicológico la falta de madurez colectiva y de un jugador que asuma el liderazgo. Todo en un recinto que no mete ninguna presión a los suyos.

LUIS CÉSAR (ENTRENADOR)

Nervios y precipitación para resolver lo antes posible

Luis César Sampedro pone un ejemplo para explicar su teoría: «Cuando eres local, pasa media hora y estás empate a cero comienzan los problemas y la precipitación, estás incómodo. Sin embargo, fuera de casa, con el mismo resultado al descanso estás cómodo», lo que extrapolado al equipo vigués le lleva a pensar que «el Celta quiere resolver los partidos en casa lo antes posible para que la afición esté contenta y eso crea cierto nerviosismo, cierta precipitación, cierta ansiedad e infortunios». A mayores aparece la motivación del adversario. «Los rivales van a Balaídos a jugar a mil por hora porque le tienen miedo al Celta, y cuando vas con temor lo que ocurre es que juegas al 120 %. Ellos no tienen que proponer nada, solo que contrarrestar, y aprovecharse de las equivocaciones del Celta». Niega que para superar las defensas tupidas le falte fútbol. «¿Quién tiene fútbol en Segunda? La diferencia entre los jugadores no es tan grande como en Primera».

J. ARMENTAL (PSICÓLOGO)

Un problema relacionado con el perfil de la plantilla

El psicólogo sostiene, desde su punto de vista y sin ánimo de crítica, que «el equipo en gran medida transmite la sensación de ser inmaduro, algo que no tiene que ver con la edad, sino a nivel psicológico. No hablo de calidad, sino de capacidad mental para soportar el llevar arriba a un equipo como el Celta. Futbolísticamente son buenos, pero a nivel mental no sé si están al nivel», cuestión que se nota más cuando los célticos se tiene que examinar ante su público: «El nivel de estrés es mucho mayor. Cuando el equipo está fuera se siente más aliviado, pero esto es deporte de alto nivel y tienes la selectividad todos los domingos». Apunta que la solución pasa porque exista gente madura «capaz de soportar la demanda de este club, que no es otra más que ascender».

RODOLFO (EXFUTBOLISTA)

Jugadores atenazados que no se atreven a hacer cosas

Rodolfo Dapena aprecia diferencias entre el juego celeste de fuera y de casa. Y opina: «Me da la sensación de que están atenazados, no se atreven a hacer cosas, parece que le puede la presión», descartando que se trate de un problema de falta de fútbol: «Fuera de casa el equipo marca goles y saca los partidos adelante y en casa le cuesta mucho marcar y cuando los marcan parece que están temerosos, inseguros, como si no se encontraran a gusto. Hay jugadores con calidad, que saben jugar y pueden hacerlo mejor».

Javier encinas (PEÑISTA)

La grada no mete ninguna presión al equipo

No es Balaídos un territorio hostil, sino que el público siempre ha estado con el equipo. Jes, de Siareiros.net, indica que «de presión nada. La gente le silbó cuando finalizó el partido, pero creo que no deben tener queja los jugadores del público de Balaídos, yo no fui consciente de que se le silbe a ningún jugador en el campo. Presión de la grada no tienen, la tienen ellos». Por contra, reconoce que tampoco Balaídos intimida a los rivales.