David Blanco: «Creía que nunca llegaría a ir al Tour, pero la vida da mil vueltas»

Mariluz Ferreiro REDACCIÓN/LA VOZ.

DEPORTES

El gallego correrá el próximo año en el Geox de Sastre y Menchov, con el que disputará la ronda francesa y la Vuelta

02 sep 2010 . Actualizado a las 03:07 h.

El rey de Portugal amplía horizontes. El compostelano David Blanco (Bienne, 1975), que en agosto ganó su cuarta ronda lusa, correrá la próxima temporada en el Geox, equipo que ya ha incorporado a Carlos Sastre y a Denis Menchov. En agenda están el Tour y la Vuelta. A sus 35 años, afrontará una segunda vida deportiva. O incluso una tercera o una cuarta. Porque, como tantos otros gallegos, las carreteras del país vecino le abrieron las puertas del profesionalismo. Después lució el maillot del Kelme. Alcanzó el top ten en la Vuelta. Y fue seleccionado para el Mundial de Madrid. Convirtió su regreso a Portugal en un paréntesis triunfal. «Pero necesitaba estar en las mejores carreras para no pensar siempre en lo que pudo ser y no fue», confiesa. Deseo cumplido. Blanco tendrá su lugar en las grandes.

-¿Qué supone fichar por el Geox de Menchov y Sastre?

-Un sueño cumplido. Nunca es tarde si la dicha es buena.

-¿Se lo esperaba a estas alturas de su carrera?

-Sinceramente, no. No soy de los que bajan los brazos con facilidad pero lo veía muy negro.

-¿Cuáles serán sus objetivos en este nuevo equipo?

-En principio disputaré la París-Niza o la Tirreno-Adriático, la Vuelta al País Vasco y las clásicas. Después, descansaré y preparé en Suiza el Tour. Y luego tocará la Vuelta a España. Está claro que tendré mis oportunidades, pero en las dos grandes mi misión es clara: estar con los líderes, sobre todo en la montaña.

-¿Qué supone para usted la posibilidad la posibilidad de ir al Tour?

-Pensaba que nunca llegaría a ir al Tour, que tendría que seguir viéndolo por la tele. Pero la vida da mil vueltas y ahora tengo la posibilidad de hacerlo. Espero aprovecharla. Todos los que empezamos en esto de la bici soñamos con correr el Tour.

-¿Y cómo ve su regreso a la Vuelta, en la que ya sabe lo que es hacer «top ten»?

-Es una carrera en la que me he quedado con la impresión de poder haber hecho mucho más de lo que he dado. Pero, en cuanto a expectativas, hay que ser prudentes e ir poco a poco. Como diría Ezequiel Mosquera: «Imos indo, imos vendo».

-Decía que en los últimos años veía la Vuelta por televisión y que se decía a sí mismo que usted podría estar allí teniendo protagonismo. Ahora verá lo que queda de carrera de forma distinta...

-Sí. ¡Ya me estoy chapando los puertos! Pero hasta septiembre del año que viene queda mucha carretera por delante.

-El Geox se perfila como uno de los grandes equipos del 2011.

-Están montando un gran equipo y que me hayan fichado me llena de orgullo. Pero una formación demuestra ser grande o pequeña en la carretera. Esperamos poder cumplir con las expectativas, que son grandes.

-¿Se va perdiendo dinero a cambio de colmar sus aspiraciones deportivas?

-No, pero sí debo decir que las aspiraciones deportivas han pesado mucho en esta decisión.

-¿Hasta qué punto hubo contactos con el Xacobeo?

-Este año no me ha llamado nadie, porque supongo que están intentando solucionar la continuidad del equipo y lo primero es lo primero. Contactaron conmigo el año pasado, aunque no pasó de una mera declaración de intenciones, porque todos sabíamos hasta dónde llegaba el presupuesto del equipo. Pero por lo menos hablaron conmigo, cosa que nadie había hecho desde el 2006.

-¿Cómo valora su paso por Portugal, donde usted es una celebridad?

-Me han tratado como a un hijo y Tavira será siempre mi segunda casa, los llevo a todos en mi corazón, porque han sido mi segunda familia. Han sido los mejores años de mi carrera y en los que más he disfrutado de la bici. Pero, sobre todo, me he sentido querido como si fuese un tavirense más y eso me llena de orgullo.

-¿Es su último contrato?

-Rotundamente, no. Como mínimo tengo cuerda para tres años más. Esta es la temporada en la que mejor me he sentido encima de la bici. No se me pasa por la cabeza la retirada. Quiero disfrutar de esta oportunidad como si se tratara de una delicatesen, como si fuera un trocito de chocolate que estuviera derritiéndose poco a poco en mi boca. Creo que mi edad deportiva no está muy correlacionada con lo que dice mi DNI. Siempre he corrido muy poco y también me he estresado más bien poco. Aunque si el cuerpo dice basta no vale la pena arrastrarse por las carreteras. Hay más vida después del ciclismo.