«Desde que empecé, la gente decía que tenía un gran potencial»

Marta Mancebo

DEPORTES

Pese a que solo lleva cinco años en la halterofilia y tiene 17 años, acaba de debutar en un Mundial absoluto

20 abr 2010 . Actualizado a las 02:29 h.

Víctor Castro Mariño (1992) lleva apenas 5 años en la halterofilia, pero a sus 17 ya sabe lo que es participar en un campeonato europeo absoluto en Minsk y conseguir nueve plusmarcas gallegas. Actualmente cuenta con una beca en la residencia Joaquín Blume de Madrid y tras dejar la categoría de 56 kilos, en la que consiguió trece récords nacionales en el 2009, ahora pisa fuerte en la categoría de 62. Después de su paso por Bielorrusia espera seguir mejorando sus marcas para hacer un gran papel en el Campeonato del Mundo júnior de Bulgaria, del 11 al 20 de junio.

-Ha sido una suerte y un premio poder viajar al Campeonato Europeo absoluto. ¿Cuáles eran sus aspiraciones y qué sabor de boca le ha quedado?

-La única aspiración con la que fui a este campeonato fue con la de coger la mayor experiencia posible. Me sirvió además para comprobar el gran nivel de este tipo de competiciones. He vuelto satisfecho del trabajo que he hecho.

-¿Cómo era el nivel de sus rivales en Bielorrusia?

-Altísimo. La gente se está preparando muy duramente para los Juegos Olímpicos de Londres en el 2012, así que el nivel de la competición era muy duro.

-¿Y el de la halterofilia en España, existen muchas diferencias con respecto a otros países?

-El nivel de la halterofilia en España es bueno, gracias a que tenemos grandes medios para entrenarnos. Sin embargo, este nivel no es comparable al de los asiáticos o turcos, que son superiores a nosotros, porque sus medios también lo son. De cualquier manera, creo que nosotros lo estamos haciendo muy bien.

-A pesar de que lleva muy poco tiempo en la halterofilia, ¿pensó en algún momento alcanzar tantos éxitos?

-Lo cierto es que no. Llevo cinco años practicando este deporte y desde un inicio tanto mi entrenador como el resto de la gente me decían que tenía un gran potencial y que podría llegar lejos. Yo no me lo creía. Ahora echando la vista atrás y comprobar todo lo que he conseguido en tan poco tiempo, la verdad es que ellos tenían razón.

-¿Cómo cambió su vida desde que se fue a la residencia Joaquín Blume?

-Inicialmente no esperaba que me diesen la beca para entrar. Ahora, el trabajo diario es duro, porque tenemos que estudiar mucho y entrenar más. Pero lo hacemos porque nuestra meta es conseguir resultados.

-¿Qué espera de su gran objetivo de este año, el Campeonato del Mundo júnior?

-No lo sé, la verdad. De momento me encuentro muy a gusto y sé que mi progresión en estos meses está siendo buena. Quizás mi máxima aspiración para este campeonato sea conseguir el récord de España, aunque de momento está demasiado alto.