Yoel se doctora también en la Liga

V. López

VIGO

21 mar 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Yoel Rodríguez jugó ayer su primer partido como titular en la portería celeste en Liga. Su primera intervención fue de las que dan seguridad a él mismo y al resto del equipo. Un mano a mano con Toché lo resolvió a la perfección con su colocación del cuerpo. Realizó seis paradas, pero tuvo bastante menos trabajo que el coruñés Rubén que defendía la portería del Cartagena. Dominó todas las parcelas salió del campo con la misma sensación que en la Copa, el Celta tiene un portero de la casa de garantías, y con futuro.

«Fue un gran partido. Sacamos los tres puntos y un gran resultado que necesitábamos. Hay que salvar esto lo antes posible», decía ayer tratando de restarse méritos. Sobre lo sucedido en el campo, y el mano a mano que salvó comentó que este tipo de jugadas «hay que saber llevarlas pero salió bien. Cuando haces una parada en el uno contra uno te da mucha confianza. Otros días hemos tenido ocasiones claras y no entraban pero en esta ocasión supimos aprovechar la oportunidad de Trashorras. Hay que saber jugar y saber sufrir también».

Yoel entregó al final del partido su camiseta a unos amigos que tenía en la grada de Gol. Al respecto comentó que «tenía bastantes amigos detrás de la portería pero creo que la afición nos apoyó más que nunca, y eso lo notamos en el campo».

Yoel estaba muy contento con su rendimiento, pero también Eusebio. El técnico no dudó en piropear al jugador que aún no había hecho debutar en Liga. «Yoel ha estado muy bien porque las veces que le ha tocado intervenir ha sido determinante como en ese mano a mano del primer tiempo. Ha tenido algunos balones aéreos en los que ha mostrado mucha tranquilidad. En los saques ha estado muy preciso y eligiendo muy bien los tiempos. Creo que es un chaval que a pesar de su juventud siempre te transmite serenidad. Tiene muy buena mentalidad y eso es bueno para un chico joven que ocupa un puesto de responsabilidad en la portería. Su rendimiento en la Copa fue muy alto, y cuando ha tenido que aparecer después de un tiempo sin jugar lo ha hecho sin ningún tipo de nerviosismo». El Celta puede estar tranquilo, al menos bajo palos.