Los futbolistas llevaban varios días en la ciudad a la espera de que se aclarase la situación de su antiguo equipo
05 ago 2009 . Actualizado a las 12:29 h.Orlando Quintana, Orlando Gutiérrez y Pedro Baquero son ya jugadores del Pontevedra. El club hizo ayer por la tarde oficial la incorporación de estos tres futbolistas que llevaban varios días en la ciudad a la espera de que se aclarase su situación contractual con su anterior equipo, el Lorca Deportiva. Finalmente el descenso de categoría del conjunto murciano allanó el camino para el fichaje de tres piezas fundamentales para reforzar la línea defensiva del técnico Roberto Aguirre. Además, el equipo granate presentó al medio centro defensivo Sergio Castaño, quien, un año más tarde, vuelve a vestir la camiseta del Pontevedra.
Y es que Quintana, Gutiérrez y Baquero son una apuesta personal del entrenador, quien los conoce a la perfección, ya que los dirigió durante la pasada temporada en el Lorca, cuando consiguió acceder a la fase de ascenso a la división de plata del fútbol español. El perfil de estos futbolistas es muy similar: jugadores veteranos, con una trayectoria contrastada en la que figuran algunos de los mejores equipos nacionales y que pueden asumir la responsabilidad durante los momentos difíciles de la temporada.
El portero Orlando Quintana (Las Palmas, 1978) militó, entre otros, en la Unión Deportiva Las Palmas, Celta de Vigo y Mérida. El central Orlando Gutiérrez debutó en la primera división con el Valladolid en la temporada 98/99, después se marchó al Éibar buscando los minutos que le faltaban en el equipo vallisoletano y, antes del Lorca, recaló en el Lleida, Castellón y Cartagena. Por último, el defensa Pedro Baquero (Huelva, 1980) jugó en el Nástic y en el Rayo Vallecano.
La salida de Igor, parada
Mientras el Levante citaba ayer por la mañana a los medios de comunicación en el aeropuerto de Manises a las 19.00 horas a donde iba a llegar, en un vuelo procedente de Vigo, el delantero brasileño Igor, el Pontevedra aseguraba que las negociaciones para la salida del atacante aún no estaban cerradas. Fuentes oficiales del club aseguraban que el lunes por la noche no se avanzó prácticamente nada y que los flecos que faltan para que se concrete la operación son «principalmente económicos».
Al mediodía el Levante desconvocaba la rueda de prensa en el aeropuerto aduciendo que el jugador se había quedado en Pontevedra por motivos personales, pero que llegaría hoy a Valencia.
Sin embargo, las versiones de los dos equipos en estas negociaciones son totalmente diferentes. Por un lado, la entidad que preside Nino Mirón asegura que el brasileño jugará en el Levante en calidad de cedido y, por el otro, el club valenciano que, aunque lo hace de forma oficiosa, afirma que esperan al delantero con la carta de libertad bajo el brazo y le ofrece un contrato de una temporada con la posibilidad de ampliarlo durante otro año más.