Buena parte de los socios del Teucro esperaban como agua de mayo la llegada de la asamblea de Asobal. Sin embargo, la noticia más deseada, que algún equipo renunciara por problemas económicos, no se produjo. Es más, ni siquiera salió a acolación algo relacionado con ese tema.
Eso tampoco debe extrañar porque Arrate y Torrevieja, que eran los grandes candidatos a quedarse fuera de la mejor liga del mundo, han solventado parte de su delicada situación económica gracias a un importante apoyo institucional.
La mayor parte del tiempo lo invirtieron en hablar de la denuncia que Asobal, apoyada por el G-14, interpondrá contra la federación europea e internacional porque «no abonan compensaciones económicas a los clubes, ni parte de los gastos de la Seguridad Social o el seguro médico para cubrir las baja de los jugadores que regresan lesionados».
Ambos organismos están defendidos por el prestigioso despacho Garriga y en concreto por el abogado que llevó el caso Bosman. Su intención es conseguir organizar las ligas europeas de clubes al margen de la FEBM y la FIBM.
Además, salió a relucir que el Banco de Sabadell dejará de patrocinar a Asobal al igual que Skoda. Renovarán su esponsorización Santiveri y Renfe. Y por último salió adelante un nuevo modelo de la Copa del Rey. El ganador de una eliminatoria entre los dos equipos que asciendan completará la primera ronda. El anfitrión entrará en liza en la segunda fase.