España conquista su Copa Davis más difícil

José María Guimaraens

DEPORTES

24 nov 2008 . Actualizado a las 09:48 h.

España consiguió por tercera vez, la primera fuera de casa, la Copa Davis. En esta ocasión su brillante conquista la alcanzó en Mar del Plata, la ciudad turística de Argentina, donde el madrileño Fernando Verdasco, en un sensacional partido, se impuso al argentino José Acasuso por 6-3, 6-7 (3), 4-6, 6-3 y 6-1 en tres horas y cincuenta y seis minutos. El zurdo de Madrid selló la victoria con un derechazo paralelo fuera del alcance del sudamericano.

La final reflejará en el historial de la Copa Davis una victoria por 3-1 de España, ya que el quinto partido, el que tenían que librar Feliciano López y David Nalbandián, fue cancelado por acuerdo entre la Federación Internacional y los dos equipos.

El desenlace de la final dejó en entredicho a los aficionados que no creían para nada en el milagro de un tercer éxito en la Copa Davis, considerando la sensible baja de Rafael Nadal. El caso es que los jugadores capitaneados por Emilio Sanchez Vicario rayaron a gran altura y ahora saborean las mieles de haber conquistado la Ensaladera de Plata. Antes de la final, pensar en un triunfo español, era algo casi imposible. Después, a la vista de lo que obtuvieron con su esfuerzo los jugadores españoles se comprende que hayan batido al cuadro argentino.

Acasuso tuvo que asumir la defensa del cuarto punto, pero acabó derrumbado físicamente. Verdasco, por el contrario, mantuvo el tono físico en todo momento e incluso en el último tramo del partido dio la sensación de haber cobrado más energías.

Cambio de programa

Aunque al principio el programa de la tercera jornada incluía el partido entre David Ferrer y Juan Martín del Potro, luego se transformó en un duelo protagonizado por José Acasuso y Fernando Verdasco. El español impuso la ley de su sólido juego desde el fondo de la pista. Tuvo un problema: las nueve dobles faltas que cometió, a pesar de lo cual tuvo siempre el control del partido.

El encuentro sirvió para comprobar que Verdasco va camino de ser un top ten . Pese a que la jornada fue pródiga en sufrimientos por parte del público y de los jugadores, el español no perdió el compás y acabó firmando muy legítimamente el quinto set. De los jugadores del circuito destaca como uno de los pocos que lanza tiros cruzados con una admirable precisión. Ese poderío técnico y físico le ayudó a superar a un Acasuso que acabó llorando, como hace dos años en Moscú.